Un nuevo episodio vivió la disputa legal que tiene enfrentados en tribunales a los animadores Ignacio Gutiérrez y Bárbara Rebolledo.

Y es que el periodista respondió a la demanda de Rebolledo con dos excompañeros, a la productora Northfield Producciones, representada por Gutiérrez, ante el 1° Juzgado de Letras del Trabajo de Santiago tras ser desvinculados del programa Cariño Malo de TV+.

Recordar que la comunicadora fue despedida junto a Héctor Molina Rojas, productor general y Carlos Gaete Reyes, director del programa. Por esta razón, demandaron subsidiariamente acusando despido injustificado, cobro de prestaciones e indemnizaciones laborales.

La cifra total que pide Rebolledo asciende a 14 millones de pesos, esto por conceptos de remuneraciones pendientes, años de servicio, mes de aviso y feriados, entre otros.

De la misma forma, solicitó la declaración de la relación laboral y la anulación del despido, por lo que la productora estaría obligada a pagar el salario y las cotizaciones desde el momento en que fue desvinculada hasta ahora.

Respuesta de Gutiérrez

De acuerdo a BioBioChile, la contestación a la demanda fue ingresada el 8 de marzo por el abogado Alonso Basualto, quien mantiene la representación judicial de la empresa tras autorización ante notario.

Ahí afirman que la también candidata a constituyente por el distrito 17 en la región del Maule “prestó el servicio convenido, mi parte le pagó sus honorarios y al término comunicó no la terminación del contrato, sino la no renovación del mismo”.

También indicaron que el contrato con Rebolledo es de carácter civil y no de orden laboral, lo que daría derecho a sus solicitudes.

Advierten que “lo anterior no es efectivo, por la materialidad de la relación contractual y por el tenor literal del contrato”.

Respuestas similares entregó para el productor general y director, respecto de quienes también desestimó eventuales deudas e indemnizaciones.