El pasado 29 de septiembre se cumplieron dos años desde que Ítalo Passalacqua falleció, producto de un paro cardiorrespiratorio.

El destacado periodista, cuyos críticos comentarios de espectáculos muchos extrañan, sufrió un choque automovilístico en abril de 2014, cuando se dirigía a ver una película, el cual le produjo un accidente vascular encefálico, producto de las lesiones.

Su fiel compañero por 30 años, Patricio Herrera, lo recordó en conversación con La Cuarta: “Hay muchos recuerdos y sensaciones, pero Ítalo me hace mucha falta”.

Consultado sobre cómo se siente, a dos años de la partida de Ítalo Passalacqua, quien fuera su pareja expresó: “Voy a usar un ejemplo: él era el que llevaba la batuta y yo lo seguía, yo marchaba de atrás. Es como en el Jappening con ja, cuando el guaripola se perdía y se iba por cualquier lado, y quedaba como un pollo. Así quedé yo, como un pollo sin cabeza“.

“Es complejo sacar fuerzas por mí mismo, porque yo dependía mucho de él y teníamos una vida muy ordenada, con una rutina, yo me acomodaba a su estilo de vida. Ahora tengo que acostumbrarme a estar solo, entonces, cometo muchos errores”, detalló Herrera.

Y añadió: “Él era un gallo de personalidad fuerte. Y aunque no quisieras, lo escuchabas y le hacías caso. Sabía lo que estaba bien y lo que estaba mal”.

Su segundo aniversario

Según contó Herrera, recordó a Ítalo en su casa, en solitario. “Los amigos que tengo están en Viña y cada uno tenía que hacer sus cosas, así que lo pasé en casa”, dijo.

“Su hermana le dedicó una misa que hizo por internet, y yo recordé la situación de cuando se fue. Intento no ponerme triste, no es fácil, pero en la casa hay muy buenos recuerdos y creo que él está mejor que acá”, contó.

Herrera aseguró que “a mí me hace falta la otra mitad de la naranja. Cuando uno conoce a la persona que va a estar tanto tiempo contigo, uno recién descubre que era sólo la mitad de algo, y cuando lo encuentras te das cuenta que eres uno finalmente. Y ahora que no él está, cojeo mucho”.

Finalmente, contó que está en compañía de uno de los perritos que tenían y con la gente que lo quiere y se preocupa por él.