Hace 17 años Pablo Vargas se hizo conocido en Rojo, Fama Contrafama, programa de talentos en donde llegó a la final, en la categoría de bailarines. Hoy su presente es distinto: no le atraen las cámaras y trabaja como periodista.

¿Le gustaría volver a la TV? “Soy súper feliz de no estar ahí. No reniego de mi pasado, pero actualmente está complicado el mensaje que se entrega, no sé si me identifica tanto”, dejó en claro Vargas al diario La Cuarta.

Sin embargo, no ha dejado de lado su faceta como bailarín, ya que actualmente combina sus facetas de comunicador e intérprete en un proyecto educativo que lo tiene feliz.

“La idea es recuperar y motivar la educación desde las artes y lo importante es que abordamos colegios en riesgo social”, explicó sobre su labor en la Escuela de talentos para el mundo en La Araucanía, en donde se desempeña como coach de baile y encargado de comunicaciones.

Y una de las características de Pablo en el recordado programa de TVN era su personalidad, en donde no tenía problemas en decir lo que pensaba, por lo que en más de una ocasión se enfrascó en una polémica con el jurado. Ese mismo ímpetu ahora lo ha llevado a las redes sociales, en donde se refiere a la contingencia.

“Siempre he sido así, opinante. Antes me decían palabrudo o falta de respeto, pero nunca he sido de esa forma”, aclaró la exfigura televisiva, quien añade que tiene que vivir con los prejuicios de la gente por ser bailarín.

Amenazas en redes sociales

Por último, Vargas manifestó que no le teme a las amenazas que abundan en las redes sociales, e incluso entregó el ejemplo de Pancho Saavedra, quien debió cerrar su cuenta.

Nunca le he tenido miedo a nadie, solamente al poder mal utilizado. Hoy el miedo es más por las amenazas en la plataforma, es el caso de Pancho Saavedra, por ejemplo, pero siempre es pura gente sin foto”, cerró el recordado segundo lugar de Rojo.


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