Daniella Chávez no seguirá en Bailando por un sueño, programa que volverá pronto a las pantallas de Canal 13 pero con cambios, en medio de la pandemia de COVID-19.

La exconejita Playboy está molesta con la producción y entregó sus argumentos a Fotech, medio al que aseguró que “desde que me fracturé jamás, pero jamás preguntaron cómo estoy. Jamás me dijeron ‘te pagamos la cuenta’. Nada. Cuando terminé la primera semana de participación me quise ir, pero tenía que pagar una multa cercana a los seis millones. A mí no me cumplieron nada desde el día 1”.

Chávez aseguró que perdió una oportunidad en Estados Unidos por nada. En enero -según contó- se tenía que ir a vivir a Miami, pero en diciembre la llamó el productor del programa, Fido, “para ofrecerme el programa y el sueldo. Por un tema de que mi hija había pasado a octavo básico quería que tuviese su graduación y eso me tentaba mucho para aceptar”.

Daniella enfatizó al medio que “siempre tomo mis decisiones por ella y le dije ‘Fido, yo acepto si esto es transparente, si es baile’. Y obviamente sé que debe existir farándula, lo sé. Que si debo llamar la atención, lo haré, pero no me sirve estar un mes y perder lo que tenía en Estados Unidos. Y me dijo, ‘sí, Daniella’. Acepté”.

Finalmente, volvió el 1 de febrero a Chile, ya que le pidieron que el 2 comenzara a asistir al canal para ensayar. “Acorté mi viaje, hice modificación de vuelos y llegué el 1 en la noche para cumplir. Otros llegaron a ensayar a mitad de mes o casi fin de febrero. Yo me comprometí y cumplí lo que dije”.

“El programa salió al aire el 29. Se cumplió el mes y jamás me pagaron por esos ensayos, nunca. Solo le pagaban a los bailarines y al coach, a los rostros solo desde que comenzaba el baile. Me saqué la cresta por nada, hubiese seguido en Miami”, reclamó.

Su experiencia con el jurado y la pandemia

Según Daniella, ella le advirtió a la producción que dos integrantes del jurado, Raquel Argandoña y Fran García-Huidobro intentarían perjudicarla: “Raquel se juntó con Pachano y lo convencía de votar en mi contra. Desde el primer minuto noté que el jurado me quería sacar. Nunca he tenido una relación con ellos, pero era muy notorio que a mí me pusieran un 3 y a (Felipe) Vidal un 7, o a Américo mejor nota que yo”.

“Después vieron que dejarme en sentencia les servía porque mi público llamaba mucho, me decían ‘Dani, el público te va a salvar’. Sentía tanta rabia y pena porque también usaron a mi hija, me hicieron hacer un comercial con ella. Mi hija jamás participa en nada y me obligaron a convencerla y lo hizo. Me decían ‘Dani te vamos a acercar con las mujeres, con la señora, y necesitamos a tu hija para el comercial’, que estuvo al aire como una semana para que después en pantalla solo mostraran mi poto. Podrían haber buscado una foto con mi hija en Instagram para mostrar”, reclamó enojada.

Chávez aseguró que la producción no la ha contactado para volver, y aunque lo hiciera no lo haría, ya que “me quedó mal sellada mi costilla, tengo una callosidad hacia afuera, me tardé mucho en recuperarme”.

Finalmente, expresó que si los tuviera en frente, les diría que “hay gente que vive de esto, que necesitan sí o sí la pega, que se prestan para todo y creo que por eso existe este tipo de producción, gente como Fido y Martín en la TV, porque siempre van a necesitar alguien a quien manipular y usar a su favor”. A su vez, dijo que entiende a los que siguen en el programa porque “es su pega, yo no lo necesito gracias a Dios”.

“Les diría que los compromisos se cumplen, que no pueden jugar con la gente. Que ofrecen un mundo para firmar y luego tratan de hacer de todo con tal de ganar ellos. Para mí fue una de las peores experiencias de mi vida, me di cuenta que la TV está muriendo por estas personas, no aguantan a alguien de verdad, no aguantan a alguien que no se deje manipular, no les sirve alguien sincera, al contrario la tachan de conflictiva porque no bailas a su ritmo”, cerró.