Desde su regreso a Chile, Gala Caldirola ha vivido junto a su hija en un departamento cercano a Canal 13 debido a su trabajo en ‘Bailando‘. Sin embargo, tras la suspensión del programa y la alerta sanitaria, aprovechó de irse a la parcela que su marido, Mauricio “Huaso” Isla, tiene en Calera de Tango.

“Pasó por varias cosas. Con Mauro (Isla) pensamos en qué era lo mejor para nuestra hija y decidimos cambiarnos”, contó la española a LUN.

Si bien en un principio cuando empezó el llamado al “aislamiento social”, Gala quería cambiarse a otro lugar pues “el espacio era un poco estrecho para Luz” y eso “podría resultar un poco estresante”, pero la decisión la tomó luego de enterarse que en su edificio habían casos confirmados con coronavirus.

Hace dos días supe de casos de contagio en el edificio y me fui. No podemos exponernos, menos mi hija que fue prematura, estuvo cinco días en una incubadora cuando nació y no sé cómo reaccionaría al virus, entonces eso también me tenía muy alerta. Doy gracias a la vida tener esta posibilidad”, explicó.

“Mauro desde un principio dijo que no fuéramos a quedar a la casa de Calera de Tango, pero me quedaba muy alejada del trabajo. No podría ir y venir entre ensayos o moverme de forma más rápida para ver a mi hija”, agregó.

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Recordemos que Caldirola contó en Bailando por un Sueño, que su relación junto al futbolista está pasando por una “crisis”. Sin embargo, confesó que lo que más le duele es la distancia de Isla con su hija, Luz Elif, pues tras el cierre de fronteras, él no puede viajar a Chile y ellas tampoco pueden volver a Estambul (Turquía).

Hacemos muchas videollamadas (…) principalmente con su papá porque ella lleva un tiempo sin verlo y con todo esto él no puede viajar y nosotras tampoco“, contó a AR13.

“La única manera que ella no sienta carencia es la videollamada y estar al teléfono todo el día, por eso hay que agradecer que hoy en día tenemos la tecnología y que tenemos esta posibilidad”, concluyó Gala.