El domingo pasado y mientras se encontraba en Rapel, región de O’Higgins, Luis Jara comenzó a sentir una tensión en uno de sus gemelos y se preocupó cuando notó que tenía una masa.

Le consultó a un médico y este le aconsejó que fuera a un centro asistencial con urgencia y le hizo caso, según informó Publimetro.

A las horas, específicamente a eso de las 04:00 de la madrugada, fue sometido a una operación debido a un riesgo de trombosis, siendo dado de alta este jueves.

Cabe destacar que todo comenzó durante sus vacaciones en Miami, mientras hacía deporte, cuando sufrió un desgarro.

Desde Mega señalaron a Página 7 que el animador “efectivamente tuvo un accidente, tenía una lesión. Ya está de alta y mañana el Mucho Gusto realizará un móvil desde su casa”.

“Estoy muy bien gracias a Dios, ya en recuperación. Lo que me dio fue un síndrome compartimental, entonces me operaron en Santiago para evitar riesgo de trombosis. Ahora estoy de alta, pero con licencia y reposo por 20 días, además de tratamiento kinésico para recuperar la movilidad de la pierna. Luego de eso podré retomar mis actividades, entre lo que se encuentran 8 conciertos por Chile, y por febrero estaré de vacaciones”, declaró Jara al respecto.

A través de sus historias de Instagram, el cantante ha compartido algunas fotos de su recuperación e instantáneas de amigos enviándole fuerza.

Luis Jara operado de urgencia
luisjaraoficial | Instagram
Luis Jara fue operado de urgencia
luisjaraoficial | Instagram
Luis Jara fue operado de urgencia
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Síndrome compartimental

Según la Biblioteca Nacional de Medicina de los EE. UU, este síndrome “es una afección seria que implica aumento de la presión en un compartimento muscular. Puede llevar a daño en nervios y músculos, al igual que problemas con el flujo sanguíneo”.

Causas
“Capas gruesas de tejido, denominadas fascia, separan grupos de músculos entre sí en los brazos y en las piernas. Dentro de cada capa de fascia se encuentra un espacio confinado, llamado compartimento. Este incluye tejido muscular, nervios y vasos sanguíneos. La fascia rodea estas estructuras de manera similar a como los cables están cubiertos por un material aislante”, explica.

Y añade: “La fascia no se expande. Cualquier inflamación en un compartimento ocasionará aumento de presión en esa área. Esta presión elevada oprime los músculos, los vasos sanguíneos y los nervios. Si esta presión es lo suficientemente alta, el flujo de sangre al compartimento se bloqueará”

Lo anterior “puede ocasionar lesión permanente en los músculos y los nervios. Si la presión se prolonga durante un tiempo considerable, el músculo puede morir y el brazo o la pierna no funcionarán más. Es posible que se necesite cirugía o incluso amputación para corregir el problema”.