Jordi Castell fue protagonista de una tremenda polémica el pasado fin de semana, cuando se le acusó de golpear a una mujer de 64 años, tras una discusión ocurrida en medio de un taco en Vitacura.

Según informaron Chilevisión y Mega, el fotógrafo, que iba de copiloto, y la supuesta afectada se enfrentaron en un diálogo, que habría terminado con la agresión. Al final, la mujer junto a su hija, María José Castro, denunciaron al expanelista de Maldita Moda con Carabineros.

Días después de lo ocurrido, Jordi dio su versión que es muy distinta a la que las afectadas entregaron en televisión. En conversación con el diario Las Últimas Noticias, primero se defendió diciendo que Castro no estaba en el lugar de los hechos, así que no podía dar su testimonio, porque no tenía idea de lo que había ocurrido.

“Íbamos en el auto (con su pareja Juan Pablo Montt), miro y era una señora la que venía atrás, tocando la bocina. Entonces me bajé y le dije hacia su auto ‘¿te tomaste las pastillas hoy?’ Ahí me volví a subir”, partió relatando el animador. Posterior a esto, agregó que todo subió de tono cuando la mujer trató de sobrepasarlo por la pista derecha.

En ese momento, Jordi asegura que le gritaron ‘degenerado’, situación que de inmediato lo indignó: “Me bajó la indiada, lo reconozco. Entonces me bajé del auto, que estaba como a un metro del de ella, y le pegué un combo a la puerta del chofer. Todo esto con el vidrio cerrado. Jamás la toqué a ella ni tampoco dañé su puerta como esta persona afirma”, detalló.

Fue en este momento que la supuesta víctima comenzó a gritar y amenazar a Castell con que lo funaría por haberla agredido. En medio de la discusión apareció Seguridad Ciudadana que le recomendó al fotógrafo que esperara antes de realizar cualquier tipo de denuncia, porque la señora estaba totalmente descontrolada.

En la 17 Comisaría de Las Tranqueras, al profesional le agradecieron que entregara su testimonio y le comentaron que lo mejor era que esperara en su casa por si el tema pasaba a mayores: “Quedé un poquito en shock porque que me digan degenerado me violenta. Eso me hizo sobre reaccionar. Quizás sí, fui un poco irritable, pero ya venía con los bocinazos durante varias cuadras. Por ahora no lo estoy pasando fabuloso con todo esto, pero estoy tranquilo porque las cámaras van a mostrar si yo realmente le pegué a la señora o no. Vamos a ver quién dice la verdad”.

El animador reconoció que no se quedará de brazos cruzados ante esta situación y que llegará a las últimas consecuencias: “Que una mujer me violente con esa forma, tocándome así la bocina y más encima me grite eso a media cuadra de mi casa, no lo voy a aceptar. Si ella quiere dejarme como un maltratador, yo voy a apelar no sólo a la realidad y a los testigos sino que a algo con que ella no cuenta, que son las cámaras de seguridad de la calle”, cerró.