Ya han pasado varias semanas desde que terminó Resistiré, el reality de Mega. El gran ganador fue Mario Sepúlveda, quien se adjudicó más de 100 millones pesos. Si bien ya llegó a su fin, aún se siguen revelando detalles del programa.

Esto porque Facundo Gómez utilizó su cuenta de YouTube para compartir un video, donde se confesó y reveló cómo fue su paso por esta aventura extrema. Lejos de quedar realmente contento con esta experiencia, el mexicano aseguró que no todo fue de su agrado.

“Odié ser conductor de un reality. Perdón Resistiré, no hablo mal de ti, pero esto no era para mí. Yo no soy un conductor así, pero tenía que hacerlo. Pero Chile me salvó, tenía que pagar deudas”, lanzó el conductor, de manera enfática. “Creo que lo primero que tendría que hacer es pedirme perdón a mi mismo, por haberme hecho esto”, complementó.

Según explicó ‘Facu’, hace cuatro meses terminó su participación en el espacio Mi pareja puede. Justo ahí se iba a quedar sin trabajo, así que cuando le llegó la oferta desde MTV y Mega, no dudo en aceptarla.

“Entonces me ofrecieron ser parte de un reality. Yo ya había estado en Big Brother y La isla, así que ahora iba a ser victimario, y no víctima. Dije ‘va a estar buena la experiencia’ (…) pero luego dije ‘lo difícil que es trabajar en un reality’, lo digo y hasta me estreso”, comentó el mexicano, quien fue detallando las cosas que le fueron molestando estos meses.

Por ejemplo, Facundo explicó que su camarín quedaba justo a un costado de las máquinas de dulces que estaban dispuestas en los containers de la producción de Resistiré. Por lo mismo, debió soportar cada vez que alguien golpeaba la máquina para poder sacar algún objeto que quedara atrapado.

También reclamó porque muchas veces debió esperar horas para poder grabar sus escenas dentro del programa, ya que los participantes discutían por largo rato entre ellos. Debido a esto, pasaba mucho tiempo encerrado en su pieza.

Pero eso no fue lo peor. Según Facundo lo que debía grabar para el programa, eran cosas a las que él estaba totalmente en desacuerdo: “No me gusta hacer licuados de pescado con ojo de vaca, en mis 25 años de tele, caí en eso por iniciativa propia. Pero no entiendo, quién lo querría ver. A mí no me divierte, no me gusta hacer esto”.

“Estas viendo unos ‘güeyes’ que sí la están pasando mal, y les das cosas asquerosas, que se terminan comiendo (…) está muy extremo jugar con la vida de los demás. De repente me ponían mostrar videos del exnovio y que entra a reclamar que su novia ya anda con otro, mostrarle los videos de los besos. No puedo hacer eso, yo no soy así”, cerró el animador.

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