Canal 13 transmitió este lunes el penúltimo capítulo de Pacto de Sangre, que inició justo después de la trágica muerte de Gabriel (Pablo Macaya), quien sufrió con los disparos efectuados por Marco (Néstor Cantillana).

El episodio mostró el momento en que Raimundo (Pablo Cerda) fue detenido, por ser uno de los asesinos de Daniela Solís (Antonia Bosman). Esta escena fue realmente dolorosa para él, ya que recibió todo el enojo de sus exparejas y de su hija.

Claro que las miradas estuvieron concentradas en Marco, quien protagonizó algunas de las escenas más notables del penúltimo capítulo. Uno de esas ocurrió justo antes de su detención, cuando se encontró con cuatro niños. A cada uno empezó a nombrarlos como si fueran sus amigos, Gabriel, Álvaro y Raimundo.

Incluso a uno lo trató de ‘Marquitos’, y le pidió un especial favor: “Nunca traiciones a tus amigos”. Posteriormente, le pasó su gorro favorito como un obsequio, para luego ser detenido por la PDI. Muy afectado, y sin oponer resistencia, el desquiciado empresario fue arrestado, al borde de las lágrimas.

Posteriormente, cuando llegó a la Policía de Investigaciones, se enfrentó a Feliciano (Álvaro Gómez), quien le exigió respuestas sobre el paradero de Benjamín (Álvaro Espinoza), ya que se sabía todo respecto a sus crímenes.

Fue aquí donde Marco lanzó otra frase que fue aplaudida por todos en redes sociales: “Benjamín es como Dios, está en todas partes y en ninguna”. Este momento fue muy mencionado por los televidentes en Twitter, donde explicaron que hasta el último minuto se guardó frases dignas de ser recordadas.

Te dejamos algunas de las reacciones ante este momento, donde muchos aseguran que extrañarán sí o sí a Marco, cuando termine Pacto de Sangre.