El pasado viernes no fue cualquier día para la joven tenista checa Sara Bejlek, ya que hizo su estreno en un Grand Slam: debutó en el US Open, último certamen de estas características de la temporada.

Y lo hizo a lo grande: venció a la británica Heather Watson por 3-6, 6-4 y 7-5, para sellar su ingreso al cuadro principal del torneo estadounidense.

No obstante, el triunfo de la joven de 16 años pasó a un segundo plano, luego que las cámaras captaran el particular festejo de la deportista con su padre y su entrenador, el que generó revuelo en redes sociales.

Jaroslav Bejlek abrazó a su hija cariñosamente, pero luego comenzó a propinarle palmaditas en el trasero, para después darle un beso, aparentemente en la boca.

Los golpecitos a Sara fueron repetidos, esta vez por su coach, Jakub Kahoun.

Críticas en Twitter

Inmediatamente, los usuarios en Twiiter condenaron el hecho: “La WTA necesita investigar esto, especialmente porque estas jóvenes viajan con hombres desde una edad muy temprana”, indicó un cibernauta, consignó BioBioChile.

“¿Tu papá te toca el trasero así?”, agregó el usuario, mientras que otros apuntaron a lo “inapropiado” del gesto del padre de la jugadora.

No hay absolutamente ninguna razón para tocar a una chica de 16 años en su trasero de esa manera”, escribió en la citada red social.

Cabe señalar que la checa perdió en su debut en el US Open, contra Ludmilla Samsonova, por parciales de 1-6 y 3-6.