A inicios de los años 90, era una de las grandes promesas del fútbol nacional, pero el 10 de octubre de 2018 marcó su vida de tal manera, que el éxito que tuvo un día quedó totalmente eclipsado. Actualmente, Luis Núñez lleva un año y medio en prisión preventiva, acusado de homicidio.
La víctima fatal fue Juan Pinto, quien recibió un disparo durante una riña ocurrida en La Legua. Mario Albornoz, quien resultó herido en esa oportunidad, identificó al exjugador de Universidad Católica, pero el autor material de los balazos sería Andrés Vergara, amigo de Luis que también está privado de libertad.
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Aunque el padre de Núñez se puso en contacto con un abogado días después, el exdeportista decidió escapar a Bolivia, donde se ocultó por 14 meses. Al hacer seguimiento a su pareja, la policía logró capturarlo con documentos falsos.
La mañana de este martes, el periodista Rodrigo Pérez logró entrevistarlo para el matinal Bienvenidos desde la cárcel de Alta Seguridad, donde Luis insistió en su inocencia.
“Estoy arriesgando 17 años de mi vida por algo que no hice. Ni siquiera andaba con una pistola. Yo no voy a dejar que me condenen”, fueron parte de sus palabras.
“Yo ese día entré a la casa a parar la conversación, pero no alcancé a acercarme porque otro amigo entró antes y ahí se sintió el disparo. Yo salí corriendo”, detalló respecto al momento de los hechos.
“Nunca disparé. No tenía arma. Quiero que entiendan que no tengo arte ni parte“, insistió.
Antecedentes
En el mismo compacto del matinal, recordaron que Luis Núñez tenía antecedentes previos, como comprador de carteras de lujo robadas y luego como financiador de una banda de narcotraficantes.
Quienes trabajaban con él en la venta de drogas terminaron tras las rejas, y él reconoció su responsabilidad en esa ocasión, pero asegura que la acusación actual por homicidio no es cierta.
“Hoy no soy culpable y estoy viviendo lo mismo”, aseguró en la entrevista.
Por otro lado, respecto al tiempo que pasó escondido en Bolivia, negó haber tenido nuevos vínculos con negocios de droga. “A mí nunca se me acabó la plata”, reconoció.
Lo que sí lamenta es el hecho de que sus hijas hayan presenciado el momento de su detención en el país vecino. Por lo mismo, las niñas de 15 y 11 años están con tratamiento psicológico.
“(La menor) llora, se siente culpable porque dice que por culpa de ella me pillaron, porque fue la última persona con la que hablé por teléfono”, contó Núñez, quien dijo sentir vergüenza de ver ahora a sus hijas, pues las apuntarán nuevamente por la detención de su padre, a quien acusan de asesino.
Amenaza de huelga
“Esta vez yo no me equivoqué. Es una maldad que me están haciendo y que no tiene explicación”, insistió el imputado en conversación con Bienvenidos, pues si bien reconoce haber estado en el lugar de los hechos, dice que la persona que lo indicó como culpable está mintiendo.
“Si hubiera tenido una pistola, me pongo los pantalones y asumo mi responsabilidad. Tomé malas decisiones, pero ahora quiero luchar por mi familia”, aseguró entre lágrimas.
En ese punto, Rodrigo Pérez le preguntó qué pasaría si lo llegan a condenar. “Me voy a volver loco. Nunca más voy a probar bocado, no voy a tomar agua. Voy a hacer la huelga más extrema que existe. No voy a dejar que me condenen”, respondió el exfutbolista.
