La ANFP salió al paso de la renuncia de todos los miembros de la Comisión de Control de Doping, luego de que estos últimos acusaran una “disminución de los estándares”, como la “eventual ausencia de médicos en los controles y disminución de controles en todas las regiones del país”.
Mediante una circular dirigida a los presidentes de los clubes chilenos, el organismo encabezado por Pablo Milad informó que esta situación “no implica, en caso alguno, que se dejarán de llevar a cabo los controles pertinentes ‘en o fuera de competencia’”, y que estos serán realizados por oficiales de la Comisión Nacional de Control de Dopaje (CNCD).
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Asimismo, aseguraron que los funcionarios de la CNCD tienen “calidad y respeto de las normas y estándares internacionales que han caracterizado el trabajo de dicha comisión y que le ha valido el reconocimiento internacional por parte de sus pares y de la propia Agencia Mundial Antidopaje”.
Desde Quilín aclararon que la decisión se fundamenta en el Código Mundial Antidopaje vigente y el Código Mundial Antidopaje 2021. Este último prohíbe “que personas que realicen paralelamente actividades de gestión y/o operativas en cualquier federación nacional, entre otras organizaciones deportivas o en entidades de gobierno, participen también en las actividades de la CNCD de Chile”.
Además, se precisa que “ni el Reglamento Antidopaje de la FIFA ni el Estándar Internacional para Controles e Investigación para Controles e Investigación de la Agencia Mundial Antidopaje mencionan que se deba tener profesión médica , o simplemente tener profesión, para realizar controles de dopaje, salvo que se trate de controles en sangre que, por el momento, no se han realizado en el fútbol nacional”.
También aclararon que los oficiales de control de dopaje del equipo permanente de la CNCD han realizado 791 controles “fuera de competencia” y 747 controles “en competencia” en el fútbol profesional chileno, desde el año 2019 a la fecha actual.
Finalmente, sostuvieron que desde el año 2019 la CNCD ha realizado actividades de educación antidopaje que ha involucrado a “gran parte de la comunidad del fútbol, tanto a miembros de los planteles profesionales, como también deportistas del fútbol joven, cuerpos técnicos, cuerpos médicos, dirigentes y otros agentes auxiliares”.
