La ciudad de Bérgamo es una de las más afectadas por el coronavirus en Italia. A la fecha se registran más de 6.400 casos y 1.100 fallecidos, cifras dramáticas en relación a un país que suma más de 70 mil contagiados y 7.503 muertos. Por lo mismo, no ha pasado desapercibido un evento realizado en esta localidad el pasado 19 de febrero.

Fue en esa fecha que se disputó el encuentro por la Champions League entre Atalanta y Valencia, disputado en el estadio San Siro, ubicado en Milán, a 60 kilómetros de Bérgamo. Hasta aquel lugar viajaron cerca de 40 mil hinchas, donde además compartieron con cerca de 2.500 fanáticos del club español. Días después de este partido, se desató el caos en el sector de Lombardía.

Así al menos lo asegura el alcalde Giorgio Gori, quien apuntó que aquel cotejo como la razón del explosivo brote de casos en la ciudad: “Fue una bomba biológica. El paciente uno apareció el 23 de febrero. Si es verdad que el virus ya circulaba, es muy probable que los 40.000 bergamascos que fueron al estadio de San Siro se contagiaran”, detalló, según lo consignado por CNN Chile.

“Nadie sabía que el virus estaba entre nosotros. Muchos se juntaron para ver el partido en grupos y esa noche se aceleraron mucho los contactos, algunos que ya tenían el virus se lo pasaron a otros”, agregó el jefe comunal, recordando que el COVID-19 estaba en plena expansión mundial para esa fecha.

De hecho, por esos días también comenzó el brote de coronavirus en España. Incluso, es bueno recordar que parte del plantel del Valencia, cerca del 35%, se contagió del virus, incluido el staff técnico. Sumado a esto, varios hinchas de ambos elencos fueron confirmados como contagiados. Cabe mencionar los casos de Ezequiel Garay o José Luis Gayá en Valencia; y Marco Sportiello, en el Atalanta.

Por otro lado, Gori comentó que “no fue todo, la chispa en verdad se produjo en el hospital de Alzano Lombardo (localidad que cuenta con 13 mil habitantes en la provincia de Bérgamo), donde llegó un paciente con una pulmonía que no fue reconocida, infectó a otros pacientes, médicos y enfermeros y ahí nació el foco del brote. Ese fue el principal problema”.

El gran inconveniente de este brote, es que tal como ha ocurrido en varias ciudades del mundo, los hospitales de Bérgamo están colapsados, lo que explica el aumento explosivo de muertos en la ciudad, y en Italia.

En este contexto, el doctor italiano Franceso Le Forche detalló que el análisis del alcalde Gori no es tan descabellado: “El partido fue hace un mes. Los tiempos coinciden. Es el ambiente ideal para el virus. Miles de personas, a menos de dos centímetros de distancia, entre gritos, abrazos y euforia colectiva. Es probable que a ese partido hayan asistido unos cuantos asintomáticos”.