A menudo cuando las celebridades andan por la vía pública o asisten a determinados eventos, deben lidiar con fanáticos que no los dejan avanzar si no se toman una selfie con ellos o les envían un saludo.

En este contexto, no todas las estrellas responden positivamente y simplemente rechazan todo tipo de contacto para evitar riesgos o situaciones engorrosas.

Una de ellas es la actriz Emilia Clarke, quien decidió no posar más para selfies con sus seguidores. Según contó la propia intérprete en el podcast Table Manners, fueron dos experiencias las que la llevaron a tomar esta medida.

Hace unos meses sufrió un ataque de ansiedad en un aeropuerto que la llevó a darse cuenta lo insensibles que pueden llegar a ser algunas personas, puesto que incluso en ese estado no dejaban de exigirle una foto.

Estaba caminando en el aeropuerto cuando, de repente, comencé a sentirme mal. Me estaba dando un ataque de ansiedad debido a mi agotamiento general. Estaba sola, hablando por teléfono con mi madre y le dije llorando: ‘No puedo respirar, no me encuentro bien’“, partió relatando.

Y en ese momento, llegó un seguidor que ignoró su llanto y y le preguntó si podía tomarse una selfie con ella. “Yo no paraba de decirle que lo sentía, pero que no podía respirar. Ha sido por momentos como esos, en los que no sé cómo reaccionar“, detalló.

La otra mala experiencia fue cuando un fanático la despertó en pleno vuelo, todo para una selfie… lo que demostró, sin duda, “una falta de sensibilidad”. “Cuando alguien me pide una foto quiero poder proporcionarle lo que busca. He estado tratando de encontrar cómo puedo hacerlo sin sentir que mi alma esté completamente vacía“, aclaró.

Por lo mismo, la protagonista de Game of Thrones indicó que en vez de una foto, prefiere firmar autógrafos y conversar con ssu fanáticos con tranquilidad. “Es una relación más cercana y una oportunidad de mantener una breve conversación que resultaría más satisfactoria que una simple foto“, sostuvo.