Se sabe que Diana de Gales tenía pocos amigos en la monarquía, sin embargo, en los 80 logró conectarse con quien sería más tarde una de sus mejores amigas y confidentes.

Hablamos de Sarah Ferguson, la británica que se casó con el príncipe Andrew en 1986, con quien tuvo dos hijas, las princesas Beatriz y Eugenia, y que una década más tarde se divorció del duque de York.

A mediados de los 80, la prensa de la época tenía siempre los ojos bien puestos sobre ambas, ya que juntas eran “dinamita”. Las dos lo pasaban muy bien y Sarah se transformó en una gran confidente para Lady Di y también en su compañera de travesuras.

Una de ellas, la más recordada quizás, tuvo lugar para la despedida de soltera de ‘Fergie’, como es conocida popularmente por su apellido. Las dos quisieron jugarle una broma a los funcionarios del palacio de Buckingham e incluso al propio príncipe Andrew.

Siempre había problemas cuando las dos mujeres se juntaban“, señaló al medio británico Daily Mail la experta en temas de la realeza, Sarah Bradford.

Esa noche ella y Diana llevaron pelucas grises y estaban vestidas como mujeres policía, mientras fingían arrestar a una prostituta a las afueras del Palacio de Buckingham. No obstante, la broma no salió como esperaban y rápidamente un par de oficiales de la guardia real, las detuvieron y las subieron a una camioneta policial, hasta que uno de los hombres reconoció a la princesa Diana y, obviamente, las liberaron.

amistad entre sarah y diana
Sarah Ferguson | Twitter

Luego de eso hubo otras travesuras que aportaron a formar un lazo muy íntimo entre ambas, tanto así que hasta el día de hoy Sarah la sigue recordando casi como una madre para ella, pese a que solo era dos años mayor.

Fergie era la espontánea y Diana era quien equilibraba sus locuras, sin embargo, hubo una broma que Lady Di no se tomó para nada bien y que, según cercanos a la familia real, provocó un distanciamiento entre ambas mejores amigas que se extendió hasta la muerte de la princesa de Gales.

La razón está descrita en las páginas del libro de Sarah My Story, publicado en 1996, donde la exduquesa de York compartió una anécdota que muchos consideraron de mal gusto y que habría molestado profundamente a la princesa de Gales.

Fergie aseguró que había terminado con una verruga en un pie después de usar unos zapatos prestados por Diana. Obviamente fue una broma, pero Lady Di no lo vio así, incluso porque Ferguson había prometido no hablar de su relación en el libro, consignó el medio británico Express.

Desde entonces el contacto entre ellas se perdió, y aunque la exbaronesa intentó comunicarse con ella en múltiples ocasiones, nunca más volvieron a hablar. Y así fue hasta el fatal accidente que acabó con la vida de la madre de los príncipes William y Harry en 1997.

En otro libro de Sarah, publicado en 2011 y titulado Finding Sarah, aborda este distanciamiento. “Diana fue una de las personas más ingeniosas y de mente más ágil que conocí. Nadie me hacía reír como ella. Tomábamos vacaciones juntas con nuestros hijos, pero lamentablemente en el último tiempo dejamos de hablar, por un año, aunque nunca supe bien la razón, debo decir que una vez que a Diana se le metía algo en la cabeza, eso se quedaba allí por un buen tiempo”, confesó.

sarah ferguson y amistad con Lady Di
Johnny Eggitt | AFP

Cabe señalar que cuando fueron familia, ambas formaron una especie de frente común contra varias reglas de protocolo que imponía la monarquía, y siempre se les veía divirtiéndose en distintas ocasiones como las carreras de Ascot, donde se sentaban juntas en el palco de la reina, o en conciertos de sus artistas favoritos como Elton John.

Asimismo, Sarah fue muy cercana a William y Harry, y este último debió ponerse firme para que su tía estuviera en su matrimonio con Meghan Markle, pues luego de su divorcio y de varios otros escándalos, Sarah no es muy querida en la familia real.