El carácter firme de la reina Isabel II es algo que siempre se ha comentado, sin embargo, la monarca parece tener una debilidad frente a la que poco puede hacer: su hijo Andrés, el duque de York.

Según destacó el medio español El País, Andrés es el favorito de los cuatro hijos que tiene la Reina y Felipe de Edimburgo.

Lo anterior a raíz de dos escándalos que le han valido varios dolores de cabeza a Su Majestad pero que igualmente parece aceptar. Uno de ellos tiene que ver con su nuevo acercamiento a su exesposa Sarah Ferguson, pese a estar divorciados; y el otro es sobre sus amistades poco “correctas”.

Esta semana se conoció que el suicidio de Jeffrey Epstein, un multimillonario acusado de explotación sexual contra decenas de niñas. El hombre se enfrentaba a 45 años de cárcel y antes de ser condenado, se quitó la vida.

El tema es que el duque de York era uno de sus amigos más cercanos, por lo que su nombre está entre los documentos que está investigando un juzgado de Manhattan, Estados Unidos. Donde se han recibido decenas de denuncias de abuso sexual en una red dirigida por el fallecido.

Incluso el duque Andrés está sindicado como responsable de tocar el pecho de una menor y de otros actos contra al menos dos víctimas identificadas como Joanna Sjoberg y Virginia Giuffre, en la mansión de Epstein en Nueva York. Eso sí, el Palacio de Buckingham ha difundido un comunicado en el que se niegan, “categóricamente”, las acusaciones de abuso sexual contra el príncipe.

Cabe señalar que desde 2010 la relación del hijo de Isabel II con Epstein ha estado en la mira de la Cámara de los Comunes del Reino Unido (cámara baja del Parlamento), desde que se viralizó una foto del príncipe paseando por Nueva York. En ese momento ellos pensaron en quitarle el título de representante especial del Reino Unido para el comercio exterior, pues se le acusaba de usar los viajes oficiales para su beneficio personal.

Sin embargo, ese mismo año la Reina lo ‘premió’ con la Gran Cruz de la Caballería, lo que restó fuerza a las presiones de los asesores de palacio para que Andrés cortara su relación con Epstein.

Respecto a su relación con Sarah Ferguson, la Reina también ha aceptado que ella esté constantemente cerca de Andrés, incluso asistió a la casa de campo del Balmoral. Eso sí, Felipe de Edimburgo no está dispuesto a aceptarla y ella se tuvo que ir de la residencia cuando él llegó.

Actualmente estarían en Cádiz, refugiándose del escándalo Epstein que sacude a la familia real británica.

Otra situación que complica a la Monarquía, pero no así a la Reina, es la relación entre Andrés y su hermano, el príncipe Carlos, y sus sobrinos William y Harry, pues se comenta que él se siente desplazado por ese lado de la familia.