Billie Eilish es una de las artistas más populares del último tiempo, sumando millones de fanáticos alrededor del mundo.

Con tan solo 17 años, la intérprete de Bad Guy ha logrado lo que otros artistas han tardo años en lograr, por ejemplo, actuar en el prestigioso festival de música Glastonbury de Inglaterra.

A su corta edad lo tiene todo: éxito, dinero, fama y, además, es muy talentosa. Sin embargo, su vida está lejos de ser perfecta. Al menos así lo dejó claro en una honesta entrevista que dio a la revista estadounidense Esquire.

Billie confesó que ahora es una persona diferente y no reconoce a la “niña pequeña” de pasado, puesto que su vida ahora no es normal. Incluso reveló que le cuesta relacionarse con sus colegas de música.

“Hace 18 meses tenía miles de amigos, era muy popular ¿Y ahora? Apenas tengo dos o tres. Nadie entiende ni mi trabajo ni mi vida. Todos me dicen: ‘Deberías estar muy orgullosa de ti, deberías ser tan feliz’, y eso me estresa hasta volverme loca porque no soy feliz. Y si me quejo les parezco una desagradecida. Ya no tengo amigos. He empezado a ir a terapia. Mi psiquiatra es la única persona con la que puedo hablar”, afirmó.

Billie Eilish confesó que ya no tiene amigos: "Mi psiquiatra es el único con quien puedo hablar"
Billie Eilish | Instagram

En este sentido, la cantante señaló que estaba pasando por un proceso de vulnerabilidad mental y tiene problemas con la imagen “hostil” que proyecta al público.

“Al principio me divertía que la gente se sintiera intimidada por mí, pero con el tiempo esa Billie Eilish de aspecto raro que da un poco de miedo se me está yendo de las manos. No consigo mantener el control sobre mi imagen, lo que me vuelve literalmente loca, pero tengo que conseguir tomar el control, como lo ha conseguido Kanye (West)“, agregó.

Por último, la artista indicó que ahora entiende por qué las celebridades se relacionen entre sí, ya que “sus vidas son tan raras y solo se entienden entre ellos”.

“Voy a cumplir 18 en diciembre y creo que podré tomar el control, no vivir siempre dependiendo de mi familia. No quiero ni tampoco creo que ellos quieran. Tengo que ser capaz de tomar el control de mi vida. Tengo que conseguirlo”, concluyó.