Isabel II lleva 67 años en el trono británico y lo asumió cuando solo tenía 26. En este sentido, los contratiempos que ha tenido durante su largo reinado son más de los que se pueden contar con una mano.

Sin embargo, hay un acontecimiento en particular el que la monarca lo ha calificado como el “mayor arrepentimiento” de su vida, y los detalles son bastante trágicos.

Se trata de la llamada “Catástrofe de Aberfan” que ocurrió en el pequeño pueblo galés, en 1966. Fue un colapso de una mina de carbón que provocó una avalancha de escombros, la cual afectó a una escuela y casas aledañas, causándole al muerte a 116 niños y 28 adultos.

El hecho fue catalogado por la prensa como “El valle oscuro de la muerte” y la reina envió a su esposo, el príncipe Philip, para que se reuniera con los afectados, lo que fue altamente criticado por la opinión pública y la prensa.

Por esta razón, la monarca llegó finalmente a la zona, pero después de 8 días desde que ocurrió la tragedia.

Es precisamente esta decisión la que catalogó como su “mayor arrepentimiento”. En 2002, la Reina confesó que no visitar a los sobrevivientes inmediatamente fue un error y que aún le pesaba en su conciencia, según consignó el portal del canal History.

Por último, Isabel II regresó a Aberfan en 2012 en el marco de su gira por el Reino Unido en celebración de sus 60 años en el trono, siendo esa la cuarta vez que volvía al pueblo, de acuerdo a la información que entregó el portal inglés Express.