Con la llegada del hijo del príncipe Harry y Meghan Markle, toda la familia real ya está dispuesta a recibir a un nuevo integrante dentro del clan más importante del Reino Unido.

Este bebé será el octavo bisnieto de la Reina Isabel II, por lo que pasará a ser el miembro más pequeño de los Windsor. Ahora bien, lo increíble es que pese a que sea un recién nacido, esta guagua ya tendrá un puesto dentro de la corona británica.

Esto se debe a que ya tiene su lugar definido dentro de la línea sucesión británica, ¿qué significa esto?, que cada integrante de la familia tiene una posición dentro de los que pueden algún día ser Rey o Reina en suelo inglés.

Actualmente, el número uno es el príncipe Carlos, el hijo mayor de Isabel. Debido a los 93 años de la dueña de casa del Palacio de Buckingham, ya se especula que dentro de un plazo corto, sea él el nuevo monarca.

¿Quién le sigue? El príncipe William, su hijo mayor, quien también es muy probable que en un minuto de su vida sea rey.

Posteriormente, el tema se vuelve mucho más interesante. Al seguir la línea de sucesión, quien ocupa el tercer puesto en la lista es el príncipe George, de 5 años. El hijo mayor del duque de Cambridge es quien también tiene grandes opciones de algún día liderar la corona. Lo sigue su hermana Charlotte, de 3 años, y Louis, que acaba de cumplir un año.

¿Y qué pasa con los duques de Sussex? Para que algún día Harry lidere la corona británica, tendrían que abdicar todos los personajes antes nombrados (o para ser más trágicos, tendrían que morir), para que así el esposo de Meghan Markle pueda cumplir esa labor.

Finalmente, en la séptima posición de la línea de sucesión al trono se encuentra el bebé de Harry y Meghan, por lo que es verdaderamente complicado que en algún momento de su vida reine en tierras inglesas. Esto no quita que pueda mantener un rol activo, tal como lo hace su padre o su tío.

Línea sucesión corona británica príncipe harry meghan
Archivo | CNN

Además, cabe señalar que al estar tan lejos de la primera posición, el recién nacido no recibirá automáticamente el título de príncipe o princesa, como sí lo tienen sus primos. Esto se debe a que en 1917, el rey Jorge V limitó los títulos reales en la familia británica, medida que afecta directamente al hijo de los duques de Sussex.

Sin embargo, como la Reina Isabel II es la que tiene el poder de cambiar todo tipo de ley o decreto, es posible que el bebé reciba algún tipo de título apenas nazca, tal como lo hizo con sus bisnietos George, Charlotte y Louis.