Este lunes se dio inicio al juicio contra Johanna Hernández y Francisco Silva por el horrendo asesinato del profesor Nibaldo Villegas.
La primera en declarar fue Johanna, quien al subir al estrado aseguró que todo fue planificado por su amante, quien además la maltrataba física y psicológicamente, por lo que incluso la habría obligado a firmar un contrato de sumisa.
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Este martes fue el turno del paramédico, quien al igual que Johanna, trató de quitarse toda culpa, acusándola a ella de ser la creadora del macabro plan para terminar con la vida del profesor, e incluso reveló que en más de una ocasión le habría pedido que contratara a alguien para deshacerse de Nibaldo.
Es en este escenario que en los matinales de TVN, Muy Buenos Días, y de Canal 13, Bienvenidos, analizaron las declaraciones y también los gestos de los imputados por el asesinato de Villegas.
“Aquí tenemos una pequeña muestra de rasgos de personalidad bastante oscuros desde esta perspectiva. Le está diciendo algo que es un delito de máxima gravedad, a lo menos decir que no, y en él esta respuesta no está presente”, señaló Mauricio Valdivia, perito forense, frente a la aseveración de Francisco sobre que ella le pidió contratar sicarios.
El profesional agregó que “no le está diciendo ‘me quiero separar ayúdame’, que sería algo concretos y realizable, le está diciendo algo que es un delito de máxima gravedad y en él no hay respuesta emocional, a él no le pareció extraño”.
Sobre la postura física de ambos imputados Valdivia comentó que: “Tenemos la misma conducta que vimos en la declaración de ella, la rigidez cuando hablan de situaciones estresantes como dar muerte a alguien (…) y como son buenos actores, pero dentro de los rasgos de psicopatía están descontados de las emociones, donde a nosotros nos traicionan las emociones, donde a nosotros nos cuesta controlarnos ellos son buenos controladores, no hay impacto emocional”.
Por su parte Christian Andrada, experto en gestos, aseguró que tanto Johanna como Francisco han mostrado movimientos exagerados, y respondió a una interrogante que ha nacido en muchos, ¿quién realmente era el que dominaba sobre el otro?
Ante esto, Andrada aseveró que de acuerdo a los gestos y actitudes demostradas en el juicio, es Johanna quien tiene una personalidad dominante, lo que echaría por tierra las declaraciones de Hernández donde aseguró que él era quien decidía todo por ella.
“El mentón de ella está 20, 25 grados sobre el plano, Francisco está hacia abajo. Mentón elevado indica estar por encima de otras cosas. El culposo que está aquí, con los hombros agachados es él”, manifestó Andrada en el programa conducido por Martín y Tonka.
Esta misma opinión es la que comparte, Carlos Collao, perito criminalístico.
“A mí me queda más que claro que la persona que ejerce un poder sigue siendo Johanna, ella trata de implantar una situación de un miedo irresistible, y siempre quiere parecer víctima”, comentó.
Agregó que: “Ella lee casi de manual lo que es un víctima de violencia intrafamiliar, ella es la sumisa, ‘él decide que me pongo, qué hago’, ‘yo sentía que sí tenía la culpa’. Los que hemos tomado declaraciones a víctimas eso es algo que sacamos de fondo, jamás lo dicen a la primera declaración”.
“Me llama mucho la atención, ella tiene un relato tremendamente bien aprendido y le ha querido pasar la culpa y traspasar toda la responsabilidad judicial a su compañero”, sentenció.
