Daniel Aguilar Hernández, supervisor de buceo, está acostumbrado a la ruta aérea que existe entre Puerto Montt y la localidad de Ayacara, en Chaitén. Él fue una de las tres personas que no abordaron la avioneta que capotó en Puerto Montt durante la mañana del martes y y que dejó seis víctimas fatales.
“En el mismo vuelo de la tragedia“, contó en una entrevista con Las Últimas Noticias.
Según él mismo aseguró al medio, tenía reservado un cupo en el avión Britten-Norman BN-28-27, perteneciente a la empresa Archipiélagos Servicios Aéreos, el protagonista de la tragedia.
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Daniel trabaja hace nueve años supervisando faenas salmoneras, específicamente midiendo cuánto tiempo se demoran los buzos pescadores en juntar a los peces.
En ese contexto, el instructor de 29 años confesó que era habitual que los viajes de la ruta aérea entre Puerto Montt y Ayacara fueran inestables.
“El tiempo en este sector es complicado. A ratos puede estar muy calmo, pero de la nada aparece el viento. Mucho viento. He tenido vuelos complicados, donde he cerrado mis ojos y me he entregado a lo peor. Con el tiempo ya se me hizo costumbre“, admitió.
A pesar de tener un asiento reservado en la avioneta, el buzo confesó que fue el destino el que decidió su suerte.
“El lunes mi jefa me confirmó un viaje para Ayacara. Debía ir a realizar un trabajo de buceo. Me coordinó mi vuelo para hoy (martes) a las diez y media de la mañana. Pero el lunes, más tarde me dijo ‘Dani, otra persona tomó tu cupo en el avión, no podrás volar a esa hora‘”.
Según el mismo contó, como no viajó ese día, se enteró del accidente cuando lo llamó una amiga. “Sabía que yo volaba a las diez y media de la mañana. Me dijo, con una voz quebrada, que pensaba que yo iba en ese vuelo. Así me enteré de todo“.
A pesar del siniestro y sus fatales resultados, Daniel admitió que seguirá con sus labores y viajando en la misma empresa: “Llevo muchos años volando en esa línea. Mañana (miércoles) tengo vuelo, pero estoy tranquilo“, detalló.