Fue el pasado martes 26 de febrero, cuando José Navarro, el llamado “Brujo de Licantén”, volvió a enfrentar a la Justicia al ser reformalizado por el caso de Emmelyn Canales, menor de 11 años que fue sustraída hace un año.

Al llegar al tribunal, el imputado gritó: “La justicia es una porquería”, según consignó el medio local Maulee. Además invitó a los periodistas a que lo visitaran en la cárcel para poder contarles la verdad de los hechos.

Sobre la reformalización, el Fiscal jefe de Licantén Andrés Gaete, señaló que esta audiencia tenía como objetivo precisar algunos hechos, específicamente sobre el delito de connotación sexual en contra de la niña.

“(El propósito) era que el imputado sepa con completa precisión, cuáles son los hechos por los que está siendo investigado, los cuales anteriormente no habíamos podido señalar con mayor exactitud, debido a que faltaban algunas diligencias”, precisó.

Recordemos que el año pasado, Navarro fue formalizado por lesiones graves hacia el abuelo de la menor, además por los delitos de sustracción y abuso sexual impropio en contra de ella. Este último caso, consiste en tocaciones. “Esa es la conducta que se ha logrado establecer”, especificó el fiscal.

“Estaríamos en condiciones de acusar pronto. Todo dependerá si en los próximos días se solicita alguna diligencia por parte de la defensa”, comentó.

Navarro continuará en prisión preventiva en el complejo penitenciario de Rancagua, a la espera de que se realice el proceso de acusación.