Gran conmoción ha generado el caso de Carolina Torres, la joven de 24 años que el viernes recibió una brutal golpiza con un palo, que la dejó con fractura de cráneo y hemorragia interna. Si bien está fuera de riesgo vital, aún está en un estado de gravedad. 

En sentido, gran alivio en la familia provocó el avance de Carolina, quien logró comunicarse de manera visual con su familia. Sin embargo, debido a la gran cantidad de sedantes continúa con un estado intermitente de su conciencia. Será este lunes que se conocerá el informe médico que dará cuenta en detalle de su estado de salud.

La familia ya interpuso la denuncia en la Fiscalía Metropolitana Occidente y será la persecutora Paola Salcedo quien comande la investigación. Esta acción se sumará a las querellas presentadas por la Intendencia Metropolitana y la Fundación Iguales.

En la familia insisten que conocen a los agresores de Carolina y que esta información ya fue entregada a la Policía de Investigaciones, específicamente a la Brisexme, que ya comenzó con los interrogatorios.

Sobre estas diligencias, la vocera de la Fundación Iguales, Isabel Amor, solicitó a la PDI tener más prudencia a la hora de efectuar los cuestionamientos y cuidar a las víctimas y testigos.

En la familia insisten en que conocen a los agresores de Carolina y que la golpiza responde a un ataque lesbofóbico, pero que la ausencia de pruebas dificultaría avanzar en las sanciones penales.

Por esta razón piden modificaciones urgentes a la ley antidiscrimantoria, conocida como “Ley Zamudio” que si bien sanciona a responsables de ataques discriminatorios arbitrarios, no tipifica estos delitos. El Gobierno ya prepara lo que será una consulta ciudadana que tendrá como objetivo entregar un borrador para modificar la normativa.