Fue la tarde del pasado viernes cuando 209 estudiantes de nuestro país recibieron un importante llamado, informándoles que eran puntaje nacional en la Prueba de Selección Universitaria 2018 (PSU).

Uno de ellos fue Alejandro Cárcamo de Magallanes, quien destacó en Matemática. A pesar de su gran desempeño, el joven criticó duramente el proceso en una entrevista con el diario La Tercera.

Esta prueba estandarizada no nos puede medir a todos. Somos 300 mil los que rendimos la PSU y no todos debemos tener habilidades estandarizadas. Las artes y la música no dependen de esta prueba, debiera haber algo más personalizado por universidad y carrera”, expresó.

Cárcamo, que quiere estudiar Ingeniería en la Universidad de Chile, explicó que se preparó haciendo un preuniversitario y ayudando a otros estudiantes a resolver ejercicios matemáticos en grupos de Facebook.

Paula de la Fuente de Rancagua, también destacó en Matemática y criticó el alto nivel de estrés al que se someten los estudiantes y que lamentablemente muchas veces les juega en contra.

Muchos lloraron, en la prueba muchos tiritaban (…) pasamos todo un año de estrés para una prueba que dura 2 horas y 40 minutos. Eso es injusto, porque tengo compañeros que son mentes brillantes y por el estrés no les fue tan bien”, señaló la joven que quiere entrar a Ingeniería Civil en la Universidad Católica.

En este contexto, Sebastián Guzmán de Machalí, también puntaje nacional, criticó que ya es hora de que se modifique la PSU, por la evidente segregación que tiene.

Creo que la PSU mide algunas cosas, pero no en su totalidad. ¿Qué pasa si a una persona le pasa algo antes de dar la prueba? A un compañero le paso que su papá estaba mal y no se presentó a dar la prueba, y no es la idea que ese tipo de cosas definan nuestro futuro. Además, yo tuve la oportunidad de ir a un preuniversitario, otros no pudieron”, sentenció el joven que quiere estudiar Ingeniería Civil Eléctrica, en la Universidad Católica.