Hace unos meses salió a la luz una denuncia por abusos sexuales y violaciones contra el cantante chileno Tito Fernández.

El hecho fue revelado en un reportaje de La Tercera, el que consignó que Fernández habría abusado de una exintegrante del Centro Integral de Estudios Metafísicos en Santiago Centro.

Los hechos se remontarían al 2010, en medio de los rituales de iniciación de la organización antes mencionada, y en la cual Tito era conocido como ‘el Maestro’, quien habría elegido a la víctima para que le diera “servicios de carácter sagrado”. De esta manera, el cantante habría aprovechado la oportunidad de abusar sexualmente de la denunciante.

A esta denuncia se sumaron otras dos mujeres, quienes revelaron los ‘rituales’ a los que las sometía para cometer los delitos.

Tras esto este martes 18 de diciembre el cantante fue citado a declarar, por lo que llegó hasta la Brigada de delitos sexuales de Ñuñoa, lugar donde declaró él y su esposa Lu Rivera.

A su salida, tal como lo ha manifestado su esposa, negó las acusaciones, asegurando que las relaciones sexuales fueron consentidas.

“Me citaron porque estoy acusado de un delito que no he cometido. Conversamos un rato largo y aclaramos muchas cosas”, sostuvo a su salida.

En la oportunidad, aclaró “en primer lugar que no era una secta, porque no se condice con ninguno de los requisitos de una secta. La gente iba a las reuniones y se volvía a su casa. No se capturaba a las personas. Tampoco hubo amenazas”, señaló.

Agregó que: “No sé por qué me denunciaron, el error que yo cometí lo estoy pagando muy caro. Reconozco que existieron las relaciones sexuales consensuadas siempre. Qué las voy a obligar yo (…) Soy inocente de las acusaciones, no de las relaciones sexuales”.

“Las relaciones fueron de tipo personal, de hombre y mujer, adultos, no hay nada de maldad”, dijo, e incluso bromeó con el revuelo que ha causado la situación: “No sé por qué hay tanto entusiasmo entre ustedes. Me hubiera gustado verlos así cuando yo cantaba”.

Tras esto, el matinal La Mañana de Chilevisión logró hablar con él a las afueras de su casa, donde nuevamente negó las acusaciones y aseguró que se trata de un montaje.

“Es un montaje muy bonito y muy interesante, pero no es real”, sostuvo y luego sumó: “Yo en este momento no pienso en ninguna acción de ningún tipo, estoy abocado a lo que está ocurriendo, que me destrozó la vida, o sea me destrozaron”.