Conmoción causó en Argentina el año pasado el caso de una mamá que asfixió a sus dos hijos, un bebé de tres meses y una pequeña de 3 años.

El parricidio ocurrió en mayo del 2018 en la localidad de San José de La Concha en Tucumán y habría sido premeditado, según averiguaron los peritos a cargo de la investigación.

Aquella fatídica tarde, María José Alvarez había terminado su jornada laboral y se disponía a pasar tiempo con sus hijos, los pequeños Máximo (3 meses) y Nicole (3 años).

Según constataron medios internacionales, María José asfixió a los pequeños para luego intentar suicidarse, sin embargo, en este último punto su plan falló, lo que llevó a su eventual detención por parte de la policía.

No tuvo juicio: la condenaron a 25 años

Después de su captura, Alvarez fue encausada por “doble homicidio agravado por el vínculo y al haber actuado con alevosía”.

La tarde del miércoles se realizó un juicio abreviado en su contra y las partes involucradas en la causa acordaron que la mujer sea condenada a 25 años de prisión efectiva, sin embargo, aún está pendiente que tribunales argentinos ratifiquen esta pena.

A pesar del castigo, existirían atenuantes dentro del caso, “ya que al momento de los hechos Alvarez sufría una depresión post-parto y era víctima de violencia de género por parte de su ex pareja, Diego Alberto Espíndola“, declaró el fiscal Ramón Enríque Rojas al medio argentino La Crónica.

“La relación con Espíndola estuvo marcada por un contexto de violencia, el hombre imponía, a través de la violencia, una relación de poder sobre la imputada, por su estado de vulnerabilidad“, señaló el fiscal.

Dentro de 10 días los jueces a cargo del caso tienen que informar si están de acuerdo con la pena de la mujer, además de dictar la sentencia en su contra.