Karen Padilla, la fiscal a cargo del caso de Viera Rivera, la chilena secuestrada en Perú, conversó la mañana de este lunes con el matinal de CHV para entregar detalles de la investigación.
Según señaló, “el caso está en investigación preliminar para determinar la tipificación correcta de los hechos denunciados”.
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En esa misma línea, aseguró que ahora Viera se encuentra bien. “Está con otro panorama. Ella me indicó que quería regresar a su país. La señora Viera ya cuenta con la tenencia provisional de la menor, ya que el juez se la otorgó”.
Sobre cómo lograr con el paradero de la chilena, la fiscal sostuvo que les llegó una denuncia que más tarde fue corroborada.
“El 1 de mayo, Viera habría ingresado a una clínica por un golpe, pero era un aborto espontáneo. El médico que la atendió, dijo que debería ser trasladada a un hospital y sus familiares no la llevaron. Ahí vimos el tema de que ellos trataron de ocultar a Viera”, detalló.
De hecho, Padilla informó que “la señora estaba ahí por su hija. No había posibilidad de que salieran. El suegro en una oportunidad le dio un golpe a la cabeza a Viera y la habría afectado psicológicamente”.
Hallazgo de Viera
La fiscal comentó que cuando llegaron al domicilio donde se encontraba la chilena, “ella estaba atónita, no reaccionaba. Esperó a que personal policial la abrazara, para así poder sacarla. Pero ella no se quería mover hasta que sacaran a su hija con ella”.
De hecho, indicó que en ese momento, “se ve a una persona muy delgada y con los resultados, tenía un cuadro de anemia”.
Consultada por la salud de la menor de edad, precisó que “una vez que nació la niña, los abuelos paternos se encariñaron tanto con ella, que tenían miedo que Viera se la llevara con ella a Chile”.
Finalmente, precisó que “es una niña que nunca ha interactuado con niños, es una niña que no sabe hablar, dice palabras muy simples y básicas”.
