La denuncia de una vecina puso fin al calvario que vivió Viera Rivera Salazar, chilena de 42 años que fue rescatada en Perú, tras pasar cuatro años secuestrada por su marido, Giorgio Armas Gabrieli y sus suegros.
Este hecho ocurrió en la localidad de Chiclayo, donde la mujer permaneció privada de libertad, junto a su pequeña hija de dos años, algo que llegó a su fin el pasado 11 de mayo.
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Ahora, y de acuerdo a BioBioChile, la Cancillería confirmó que se encuentra asistiendo a Rivera, e iniciando los trámites para que pueda retornar al país a la brevedad.
Cabe señalar que el proceso empezó luego de una solicitud realizada por sus familiares desde Chile, mediante el Consulado, al Ministerio peruano de la Mujer y Poblaciones Vulnerables.
Según indicaron desde el Ministerio de Relaciones Exteriores, Viera, oriunda de Traiguén, se encuentra en hogar de la ciudad de Chiclayo, “a la espera de que su estado de salud se estabilice”.
“El Consulado está coordinando su traslado a Lima, para luego apoyarla en los trámites necesarios que permitan su retorno a Chile, en compañía de su hija”, agregaron desde Cancillería.
El calvario de Viera Rivera
Recordemos que de acuerdo a información del Diario Correo, Viera viajó hasta Perú, luego de conocer a su esposo a través de Facebook.
“Al vivir en casa de mis suegros, me insultaban de la peor manera, pese a que estaba embarazada”. Además, reveló que su suegro la golpeó al descubrir que le pedía ayuda a su hermana para que la rescataran.
“La comida me la daban por la puerta y luego me encerraban, pues todo el día me tenían vigilada”, dijo Viera, quien también se refirió a la condición de su hija.
“Ella no habla, no interactúa con otros niños porque no hemos salido a la calle. Mi hermana desde Chile hizo una denuncia, pero me obligaron a mentir y la denuncia se archivó”, sentenció.
