Giorgio Jackson, el ministro de la Segpres, respondió durante esta jornada a los dichos de Karina Oliva en Meganoticias.

Recordemos que la excandidata a Gobernadora Metropolitana rompió el silencio tras la investigación en su contra, por supuestas anomalías en la rendición de sus gastos de campaña.

En la entrevista, se refirió al alejamiento de Gabriel Boric y a una eventual participación de personas del Frente Amplio en el manejo de dinero.

Al respecto, el secretario de Estado fue tajante en decir que “absolutamente todas las facturas, toda la rendición de cuenta que nosotros tenemos, tanto de la primera, como de la segunda vuelta de la candidatura de Gabriel Boric, ya fueron revisadas y aprobadas por el Servel o están en el último trámite de terminar de ser aprobadas”.

En esa misma línea, comentó que “cualquier antecedente adicional, nosotros felices de poder aportar para que esas investigaciones concluyan”.

De hecho, precisó que “no tenemos ningún antecedente nuevo que haya modificado dichas aprobaciones de nuestras cuentas, por lo tanto, no tenemos mucho más que agregar y estamos plenamente disponibles para cuando sea necesario”.

Giorgio Jackson y rendición de gasto

Jackson aseguró que en cuanto a la rendición de gasto, “no ha habido ninguna observación por parte de la autoridad competente. Es decir, que todo el gasto que nosotros, desde la campaña de Gabriel Boric rendimos, fue autorizado, fue totalmente íntegro”.

Insistió en que “si es que hay algún antecedente adicional, en el cual nosotros podamos colaborar, lo vamos a hacer de manera totalmente transparente. Pero no ha habido ningún elemento adicional que la autoridad competente nos haya observado”.

En cuanto a la queja de Oliva, por la postura que tomó Boric luego que se dieran a conocer las acusaciones, señaló que “eso fue un momento complejo antes de la realización de las elecciones y posteriormente también”.

Agregó que “con la misma fuerza, el mismo Presidente, en ese momento candidato, rechazó el cómo se ocupó un horario prime con las policías para hacer un allanamiento que a todas luces era absolutamente desproporcionado en términos del uso de la fuerza. Ahí no había nadie adentro y llegó un contingente como si hubiese casi artefactos explosivos al interior, cuando alcanzaron a retirar, creo que con suerte, un computador y una carpeta”.