Este lunes 25 de abril comenzó el juicio por el homicidio de Albertina Martínez, joven fotógrafa de 38 años que trabajaba como asistente de iluminación en Mega.

Jairo González, autor confeso del crimen, renunció a su derecho a guardar silencio, con el objetivo de recalificar el delito y no enfrentar una cadena perpetua.

Los sucesos se remontan al pasado 20 de noviembre de 2020, día en que la mujer fue asesinada en su propio departamento.

El sujeto fue detenido dos meses después de los hechos, y este lunes, cuando ya han pasado más de 500 días desde aquella fatídica noche, reveló su versión de lo ocurrido.

De acuerdo a su testimonio, González habría conocido a Martínez por Grinder, una aplicación en la cual vendía drogas, de las que, supuestamente, proveía a la mujer.

“Estábamos sentados en el sillón y ella se acercaba con otras intenciones, no malas. En ese momento yo estaba drogado, me sentía atrapado”, dijo.

“Ella se enfadó y me dijo que era fome, que la iba a ver y me iba altiro. Reaccionó mal, me tiró un vaso de cerveza en el cuerpo y yo también reaccioné mal, lo admito. La empujé”, agregó.

Las pruebas presentadas por el Ministerio Público muestran que, además de los golpes que recibió, fue amarrada y amordazada, consignó Chilevisión Noticias.

“Le hice un nudo alrededor de la boca para que no pudiera alertar a los vecinos y no me hicieran nada cuando yo saliera. Estaba nervioso, asustado. Estoy arrepentido”, sostuvo.

La Fiscalía solicitó el presidio perpetuo calificado y de ser encontrado culpable, arriesgaría hasta 40 años de prisión. La defensa, en cambio, busca que los tribunales recalifiquen el delito, apuntando a casi 30 años menos.