Este miércoles el programa de CHV, Contigo en directo, conversó con Ricardo Ramírez, el hombre que se hizo conocido por su historia de esfuerzo a sus 80 años.
El hombre de la cuarta edad trabajaba como conserje en el edificio Ralún de Viña del Mar, en el turno de noche, ya que de día cuidaba a su esposa, con quien lleva 50 años de relación.
De esta manera, salía cada tarde de su casa en Quillota rumbo a la ciudad jardín, recorriendo cerca de 100 kilómetros diarios.
No tenía otra opción, pues su pensión no le alcanza para vivir.
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Dejó de trabajar por no pago de sus cotizaciones
El pasado lunes se dio a conocer que Ricardo Ramírez demandó al edificio, debido a que le adeudan sus cotizaciones y no lo han indemnizado por sus 26 años de servicio.
Ricardo Ramírez llegó a trabajar en 1997. En medio de las cuarentenas que enfrentamos por la pandemia, una vecina dio a conocer su historia, pues en el edificio no contaban con las medidas de seguridad para cuidarlo.
Nancy Godoy, quien vive en el edificio, aseguró que desde el inmueble no quieren pagar las cotizaciones y que incluso él recibe insultos.
“No son casos aislados, yo creo que es una práctica que lamentablemente se está dando en Viña (…) el caballero no cuenta con internet, no tiene un hijo que le ayude con los trámites”, manifestó Nancy.
Este miércoles, la misma mujer aseguró a Contigo en directo que “no están pagando cotizaciones desde 2018” y que él merece ser indemnizado.
Ricardo Ramírez pide que le paguen lo que le deben
En conversación con el programa, el conserje aseguró que “lo principal es que cancelen todo lo que deben, hay un abuso tremendo del administrador y presidente. Él debiera decir que me paguen lo que corresponde”.
Ricardo Ramírez llegaba al edificio a eso de las 19:00 y se retiraba 12 horas después, es decir a las 07:00. Incluso, llegó a trabajar cuatro domingos seguidos, según contó Nancy, lo que no es permitido.
Las horas extra tampoco se las pagaron y la última vez que fue al edificio para intentar solucionar la situación, le ofrecieron un cheque con una cifra que él no encontró suficiente y no quiso firmar.
Por eso acudió a la justicia aunque le tomará más tiempo. La audiencia está fijada para junio, pero no contaba con un abogado que lo representara. Tuvo una, pero le cobraba el 20% de lo que le pagaran.
Pero eso cambió, pues en el contacto apareció un abogado que se ofreció a ayudarlo de forma gratuita.
El profesional también representará a la vecina que apoya a Ramírez, Nancy, pues está siendo victima de un conserje que le grita y la amenaza, según acusó.
