La joven condenada a prisión perpetua por el asesinato de su novio, Nahir Galarza, ahora dijo que fue su padre el culpable del homicidio a Fernando Pastorizzo.

“Yo no lo maté a Fernando, fue papá”, le aseguró entre lágrimas la joven a su abogada Raquel Hermida Leyenda, quien este viernes se presentó en la Fiscalía Criminal de turno para denunciar a Marcelo Galarza.

Todo habría comenzado el pasado 29 de diciembre cuando la joven condenada llamó reiteradas veces a su abogada, quien días después decidió viajar a Paraná para escuchar a su defendida.

“El equipo interdisciplinario obtuvo el dato que faltaba para completar el relato de Nahir. Había un hueco, algo que ella no decía. Pudimos comprobarlo. Lamentablemente confirmamos que la palabra patriarcado no es una palabra feminista, sino judicial”, comentó Hermida Leyenda a Infobae.

Y siguió: “El verdadero asesino de Fernando sólo pudo estar libre con la anuencia de abogados, fiscales y funcionarios del Poder Judicial. Sólo tenía 19 años y tardó cuatro años para poder hablar. ¿Por qué lo hizo? Porque no la defendieron ante un abuso sexual, pero eso lo contaremos en otro momento”.

Denuncias contra supuestos responsables

Según contó una fuente de la causa al mismo medio, “Nahir había estado en la escena del crimen, pero Galarza se ocupó de todo. Anduvo en auto. Estuvieron en todos los detalles, por ejemplo, en no ser registrado por las cámaras de seguridad”.

“Su primer abogado, Víctor Rebossio, también fue denunciado porque fue el que la llevó a que ella se declarara culpable. Después cambiaron la versión a que fue un accidente. Hubo un entramado judicial para culparla a Nahir”, agregó.

La abogada también denunció al fiscal de la causa, Sergio Rondoni Caffa, y al abogado Marcelo Reborsio, el primero que defendió a Nahir.

Se pudo saber que en su confesión Nahir señaló que su tío paterno la abusó sexualmente cuando era menor de edad y por eso se realizó otra denuncia por violencia de género.

Desde el entorno de la joven indican desde un comienzo que la relación con Fernando era muy tóxica y que siempre había discusiones.

Nahir fue condenada a prisión perpetua por homicidio, agravado por la circunstancia de haber mantenido una relación de pareja estable.

La Justicia estableció que la joven le disparó por la espalda a Pastorizo con la pistola 9mm de su padre policía.

La condena que recibió Nahir es la más alta en Argentina para una mujer de su edad. En 2018 la Cámara de Casación Penal de Entre Ríos decidió que la joven fuese trasladada a una cárcel común de mujeres en Paraná para su resguardo.

Desde ese momento tuvo diversos mensajes en redes sociales en donde se mostraba con compañeras del penal y hasta se pudo saber que mantenía un noviazgo con otro joven que cada tanto la iba a visitar.