Durante la tarde de este martes, el Gobierno se refirió a la aprobación de la Acusación Constitucional contra el presidente Sebastián Piñera, señalando que “la decisión de una ajustada mayoría de la Cámara de Diputados es injusta y no tiene fundamento alguno, ni en los hechos ni en derecho”.

Tras una maratónica sesión de 22 horas, la Cámara de Diputados y Diputadas aprobó la mañana de este martes la Acusación Constitucional contra el presidente Sebastián Piñera, con 78 votos a favor.

En tanto, hubo 67 opiniones en contra y tres abstenciones (Pepe Auth, Pablo Lorenzini y Carlos Abel Jarpa).

En un comunicado emitido por la Secretaría General de Gobierno, se explica que según el ordenamiento jurídico chileno, las acusaciones constitucionales tienen dos etapas.

“Se inician en la Cámara de Diputados, que debe resolver la admisibilidad de la misma y, en el evento que ello ocurra, la acusación debe ser conocida por el Senado de la República, el que, por 2/3 de sus integrantes y actuando como jurado, resolverá si la acusación tiene mérito para ser aprobada o debe ser rechazada por falta de fundamentos”, se detalla en el documento.

En esta misma línea, el Senado cuenta con un plazo de entre 4 y 6 días para tratar la acusación. En el intertanto, el Presidente de la República continúa ejerciendo plenamente sus funciones.

“Acusación injusta”

“Como Gobierno estamos convencidos de que la decisión de una ajustada mayoría de la Cámara de Diputados que apoyó la acusación es injusta y no tiene fundamento alguno, ni en los hechos ni en derecho”, dijeron desde La Moneda.

Por lo anterior, el Gobierno espera que el Senado desestime la acusación interpuesta, asegurando el traspaso del mando de un presidente electo “democráticamente al presidente que elija la gente, como ha ocurrido siempre en Chile desde el retorno de la democracia”.

“No votan por su convicción”

Por su parte, el ministro Vocero de Gobierno, Jaime Bellolio, dijo que “esta es una acusación electoral y no una acusación constitucional”.

Además, señaló que el problema es que se daña la democracia de manera irreparable. “Se abre una puerta diciendo que los Presidentes pueden no durar cuatro años porque hay algunos que por pequeñeces, por miedo a las redes sociales, por miedo a compañeros de bancada, por miedo a que los amenacen o los funen, no votan por su convicción, sino que votan por su supuesta conveniencia”, fustigó Bellolio.

Finalmente, indicó que no tienen ninguna duda de que en el Senado lo que va a primar es “no solamente la cordura, sino que va a primar la justicia”.