La filtración de 12 millones de documentos sobre las fortunas de personas poderosas de 90 países, dejó al descubierto las complejas redes que se construyen en el mundo de los negocios para mover dinero o establecer empresas en paraísos fiscales.

Dentro de los involucrados en los denominados Pandora Papers, se encuentra el empresario y filántropo Leonardo Farkas.

De acuerdo al reportaje de Ciper Chile, el multimillonario recurrió a los servicios de Alcogal (Alemán, Cordero, Galindo & Lee) en 2008, para constituir tres fundaciones de interés privado (FIP) en Panamá.

Lo anterior, con la finalidad de poder organizar la sucesión de su patrimonio a su esposa y sus tres hijos, sin una carga impositiva real por sus ingresos.

De ese modo, los activos de las organizaciones (Con Suerte Foundation, Kookie International Foundation y Pulichulis Foundation) quedan libres de impuestos y no pueden ser objeto de embargo. Además, se ofrece una confidencialidad sobre sus beneficiarios o dueños finales y no hay requisito legal que obligue a transparentar quiénes son.

Cabe señalar que dicho bufete de abogados asesoró a personas implicadas en algunos de los escándalos de corrupción más mediáticos en Latinoamérica.

Abogado se refirió al caso

En este contexto, el abogado de Farkas, Juan Ignacio Correa, rechazó la intencionalidad de evadir impuestos por estas fundaciones, explicando que desde su creación, el empresario nunca las utilizó.

“Le recomendaron (a Farkas) hacer fundaciones para sus donaciones religiosas y de beneficencia o a orfanatos, entre otras, y para regular su sucesión, pues a juicio de sus asesores de entonces resultaba menos engorroso hacerlo a través de ese tipo de entidades”, detalló.

Asimismo, aseguró que no tiene inversiones ni ingresos provenientes de ninguna fundación, institución, empresa o sociedad extranjera situada en paraísos fiscales.

“Tampoco tiene negocios en ninguna parte del mundo. Sustenta su vida, la de su familia y los actos de filantropía que realiza con el producto de sus inversiones pasivas registradas a su propio nombre, pagándose todos los impuestos que correspondan”, sentenció.