Fue el pasado 25 de agosto que el fiscal jefe de Delitos Violentos, Christian Toledo, interrogó a Leonel Contreras Canales, detective investigado por el homicidio de la subinspectora Valeria Vivanco.
Recordemos que la funcionaria de la PDI falleció en medio de un operativo en la comuna de La Granja, producto de una bala que provino de un arma policial, de acuerdo a las indagatorias, algo que fue confirmado por el director de la institución, Sergio Muñoz, a mediados de agosto.
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En la instancia, Contreras se refirió al momento en que cayó abatida la joven policía e insistió en que la pólvora hallada en sus manos se debió a que él presionó la herida de su compañera.
Esto fue confirmado por La Tercera, que tuvo acceso a la declaración del imputado en el caso. ¿Cuál fue su explicación? “A consecuencia de que fui yo quien presionó la herida con las vestimentas y la manipuló, ya que la tomé en mis brazos, (…) pudo haberse producido un intercambio de material a mis manos”, sostuvo Contreras.
Respecto a los peritajes que darían cuenta que su pistola percutó el arma que le quitó la vida a Vivanco, el policía manifestó que “no tengo explicaciones ya que como he indicado yo no efectúe disparo ese día”.
“Yo mantenía 16 cartuchos en total en mi arma y esa fue la cantidad de municiones que entregué al momento de la incautación de mi pistola. Ya que si yo hubiese efectuado un disparo ese día me habría dado cuenta“, agregó.
Respecto a si sus otros dos colegas investigados pudieron percutar el arma, Contreras señaló que “no podría haberme percatado, porque ellos estaban hacia mi espalda“.
Protestas en la Parada Militar
Cabe señalar que el pasado domingo, familiares de la subinspectora de la PDI, Valeria Vivanco, expresaron su molestia por la participación del alto mando de la PDI en la parada militar.
Cerca de tres horas estuvieron los familiares y amigos de la joven a las afueras del parque O’Higgins, exigiendo respuestas.
“Ellos dan la cara en la parada militar, pero no la han venido a dar acá, a la casa de una mártir de la PDI. Nuestra intención de manifestarnos era dejar en evidencia la vergüenza que tenemos por una institución que no es capaz de proteger a su personal”, sentenciaron.
