La Lista del Pueblo, agrupación política que surgió tras el estallido social del 18 de octubre de 2019, se encuentra bajo la lupa, luego que su propia Comisión de Ética detectara escandalosos pagos a familiares de candidatos a la Convención Constitucional (CC).
De acuerdo a un artículo de Ciper, consignado por BioBioChile, el conglomerado que logró 27 escaños en el órgano que debe escribir una nueva Constitución, identificó un total de 24 boletas y facturas emitidas por familiares de candidatos, incluyendo algunos que no alcanzaron los votos suficientes para ser parte de la CC.
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Los pagos millonarios se identificaron en las regiones del Biobío y Metropolitana, los que si bien fueron rendidos al Servel, hoy están siendo analizados por la agrupación. Asimismo, aseguraron que expulsaron de sus filas a Miriam Parra y al excandidato Ricardo Mahnke.
Cabe señalar que el Servel autoriza pagos que fluctúan entre $1.148 y $1.435 por sufragio emitido, haya ganado o no el candidato o candidata a convencional. En la elección, La Lista del Pueblo alcanzó un total de 504.145 votos.
Pese a que la entidad no tiene restricciones en cuanto a los pagos, Evelyn Godoy, quien en julio lideraba la Comisión de Ética de la agrupación, señaló a Ciper que “éticamente no corresponde que existan boletas a familiares”.
“El Servel no da valores ni precios, pero sí dijeron que las boletas tienen que ser acordes al mercado”, agregó.
“Ahí es cuando nace la disyuntiva, porque si hay alguien que está recibiendo reembolsos por su candidatura para pagar esos servicios, pucha, qué lata que aparezcan casos en que esos recursos se dieron a familiares”, indicó.
Conscientes de la polémica, desde el conglomerado señalaron a Ciper que están analizando exhaustivamente la existencia de “antecedentes judiciales, ingresos y conexiones familiares de cada uno de los precandidatos a las próximas elecciones parlamentarias”.
Montos y familiares beneficiados
Desglosando la información, en la región del Biobío, Miriam Parra, asesora de varios aspirantes, cobró distintos precios a cada uno, sumando un total de $7,5 millones en cuatro boletas.
Asociada a la excandidata Karen Francisca Orellana Sullivan, existen diez boletas hechas por dos hermanas, dos primas, una tía y un cuñado, cuyo total asciende a $12,5 millones.
En el caso de Mahnke, su hijo de 19 años, cobró una boleta por $1.100.000 por servicios de “fotografía, edición y video” en la campaña de su padre.
Su nombre también figuró en la rendición de cuentas de la convencional Rossana Vidal, con una boleta de $1 millón.
Alexandra Daza Cifuentes, hija del excandidato Fernando Daza Mardones, figura con una boleta de $300 mil como brigadista.
En la región Metropolitana los montos son aún más escandalosos, pues en el caso de Orellana, su hermana cobró $2,8 millones como jefa de campaña y $1,3 millones por manejar sus redes sociales.
Su otra hermana, Carol, cobró como “asesora contable” un monto de $1,6 millones y también $915 mil como “brigadista”.
Su prima Nicole, cobró $1,2 millones y $915 mil como brigadista. Katherine, otra prima, junto a su madre, Marcela Núñez, emitieron boletas por $915 mil cada una y la pareja de una hermana por $915 mil y $903 mil.
Soledad Mella, quien actualmente está interesada en llegar al Parlamento por el distrito 11, tiene ocho boletas que suman $15,4 millones.
Dentro de esa cifra destacan los pagos a su nuera ($2,8 millones), un sobrino ($1,2 millones) y su esposo, este último con la boleta más abultada de todas por $5,5 millones, por su trabajo en redes sociales.
