Nueve menores de edad huyeron desde la residencia Catalina Kentenich, administrada por la fundación María Ayuda, colaborador del Servicio Nacional de Menores (Sename), ubicado en el sector norte de Rancagua, en la Región de O’Higgins.
El hecho quedó al descubierto en la tarde del domingo, cuando una joven salió a comprar y se percató que los menores -tres de ellos de sexo femenino- corrían desesperados, algunos descalzos y otros con el torso desnudo.
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Los niños denunciaron malos tratos, por lo que una mujer identificada como Camila Valenzuela, realizó una videollamada a su mamá para que constatara la situación y los llevó a su casa.
La dueña de la casa, Gabriela Valenzuela, aseguró que los niños estaban en malas condiciones, sucios y semidesnudos, por lo que decidió auxiliarlos y alimentarlos.
Más tarde, tomaron la decisión de llamar a Carabineros, pero los menores de edad se subieron a los techos y se escondieron en la vivienda.
Camila Valenzuela y sus vecinas aseguraron que algunos pequeños tenían lesiones, por lo que no querían regresar a la residencia colaboradora del Sename.
