Fue el 2 de octubre del año pasado cuando un adolescente, identificado como A.A.J.A, de 16 años, fue empujado desde el Puente Pio Nono al lecho del río Mapocho en Santiago, en medio de manifestaciones en el sector de Baquedano.

Por este hecho, el sargento de Carabineros, Sebastián Zamora fue formalizado debido a su responsabilidad en los hechos, quedando con arresto domiciliario, tras pasar cinco meses en prisión preventiva, luego de ser imputado por el Ministerio Público. Además, fue dado de baja de la institución.

Sin embargo, la fiscal del caso, Ximena Chong no sólo se encuentra investigando el homicidio frustrado del joven, que quedó con graves fracturas tras la caída, sino que de forma paralela se encuentra recabando antecedentes, respecto a supuesta obstrucción a la investigación de parte de los mandos de Carabineros.

Lo anterior, luego que un informe de la Brigada de Derechos Humanos de la PDI detallara que varios uniformados, incluyendo a Zamora, llamaron a la fiscalía diciendo que la caída del adolescente se debió a que estaba escapando, tras hacer desmanes en la vía pública, algo que para Chong resultó ser falso, como lo señaló en la audiencia.

“(Chong) pretende, a través de estas acciones ilegales (…), imputar algún supuesto delito a un oficial general de Carabineros”, dijo Jorge Martínez, abogado del general de Carabineros Enrique Monrás, generando una tensión entre la investigadora y la institución.

Declaraciones

Por lo mismo es que desde la fiscalía citaron a los generales a declarar. Así lo hizo la generala de Carabineros Berta Robles Fernández, quien se encontraba como jefa de Servicio de la Zona Metropolitana, el día del incidente.

En su declaración señala que se percató de lo ocurrido mediante las cámaras y que luego llamó a una ambulancia y emitió la orden de que “personal de Control de Orden Público (COP) dejara de intervenir con gases y agua para no entorpecer las maniobras de rescate”, reveló La Tercera.

Tras volver a revisar las imágenes, determinó que el joven se encontraba realizando “desórdenes públicos”, por lo que debía quedar detenido.

“El niño no estaba manifestándose pacíficamente, sino que estaba causando desórdenes públicos. Según mi criterio, él antes que víctima fue victimario. Aclaro que fue víctima de una caída”, fue parte del testimonio de Robles.

También declaró la teniente coronel Paola Muñoz Egaña, quien llegó a la comisaría donde estaba Zamora tras la caída del joven. Al preguntar cómo había sido el procedimiento, Zamora le dijo que “estábamos en la arremetida y no sé en qué momento pasó esto que el chico se resbaló'”.

“Cuando se verifica que estaba participando en las manifestaciones se procede a establecer que pasaría a detenido”, agregó la teniente Muñoz.

Por último, los altos mandos de Carabineros también declararon ante la fiscal Chong. El general Enrique Monrás reconoció que le instruyó a Robles iniciar un sumario administrativo y que “vean bien” el tema.

Asimismo, al día siguiente pudo conversar con Zamora preguntándole si necesitaría asesoría legal tras lo ocurrido, pero dejó en claro que la generala Robles era quien estaba a cargo del procedimiento y que fue ella quien ordenó detener al joven que había caído al Mapocho.

Por su parte, el general Enrique Bassaletti sólo acotó que se enteró “por redes sociales o por la prensa” de que un menor había caído, luego de una intervención policial.