Al menos cuatro personas murieron en Guinea debido a una nueva “situación de epidemia” de fiebre hemorrágica de Ébola, cinco años después del fin del brote anterior, indicó este domingo el jefe de la agencia de salud de Guinea, Sakoba Keita.

“Muy temprano esta mañana, el laboratorio de Conakry confirmó la presencia del virus del Ébola”, dijo Keita después de una reunión de emergencia en Conakry, que dio cuenta de siete casos, de los cuales tres mortales.

El ministro de Salud, Rémy Lamah, había mencionado el sábado por la noche un número de cuatro muertos.

Este es el primer resurgimiento registrado de la enfermedad en África Occidental, donde comenzó el peor brote en la historia del virus, que mató a más de 11.300 personas entre 2013 y 2016.

Tras una reunión de emergencia en Conakry, Keita, que dirige la Agencia Nacional de Seguridad Sanitaria (ANSS), explicó a la prensa que una persona había fallecido a finales de enero en Gouecké, cerca de la frontera con Liberia.

“Su funeral tuvo lugar en Gouecké el 1 de febrero y algunas personas que participaron de este funeral comenzaron a tener síntomas de diarrea, vómitos, derrames de sangre y fiebre unos días después“, dijo el titular del organismo de salud.

Las primeras muestras analizadas por un laboratorio instalado por la Unión Europea en Guéckédou, en la región, revelaron la presencia del virus del Ébola en algunas de ellas el viernes, dijo.

“Muy temprano esta mañana, el laboratorio de Conakry confirmó la presencia del virus del Ébola”, agregó Keita. “En total, hubo siete casos, incluidas tres muertes“, afirmó.

“Esta situación pone a Guinea en una situación de epidemia de ébola”, concluyó el médico.