El Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh), denunció que una mujer trans, identificada con las iniciales K.M.P. (31 años), ha sufrido constantes torturas en razón de su identidad de género en manos de funcionarios/as del Centro Penitenciario Acha Arica, de acuerdo al relato de la madre de la víctima.

Estas acusaciones se conocen a solo 4 días de que el interno Boris Esteban Castillo Arriagada (23), se suicidara en el Complejo Penitenciario de La Serena, tras recibir reiterados abusos en razón de su orientación sexual en manos de gendarmes, los que fueron denunciados por el Movilh en junio de 2020 a la institución.

En esta oportunidad, la madre de K.M.P. relató que desde noviembre del 2020 su hija ha visto vulnerados sus derechos en razón de su identidad de género en manos del funcionario de Gendarmería, Hugo Martínez, y de la paramédico Claudia Claveles.

Mi hija “está siendo violentada psicológica y físicamente por su identidad de género, al extremo que la hacen desnudarse ante varios miembros del recinto para decir y ‘demostrar’ que es ‘un hombre’. Le están haciendo mucho daño”, precisó la madre.

Además, de acuerdo a la denuncia, la mujer ha recibido golpizas, le han lanzado gases, la ofenden con frases transfóbicas, la desnudan para que otros/as vean sus genitales y le niegan el acceso a las hormonas para el tratamiento de cambio corporal.

Por todos estos hechos, el pasado 25 de enero, la madre de K.M.P. visitó de urgencia a su hija, percatándose de su grave estado de salud, por lo que dos días más tarde se reunió con el alcaide del Centro Penitenciario.

“En tal ocasión, la madre le dio a conocer las agresiones de que habían sido víctima su hija, pero la respuesta del alcaide fue que la interna se portaba un poco mal. Es decir, justificó de cierta manera los actos denunciados. Asimismo, luego de la visita, la interna le comentó que sufrió nuevos malos tratos por parte del gendarme Sr. Martínez, a modo de represalia”, señaló la abogada del Movilh, en misivas dirigidas al director nacional de Gendarmería, Christian Alveal Gutiérrez, y al Instituto Nacional de Derechos Humanos, INDH.

Declaración del Movilh

El vocero del Movilh, Óscar Rementería, afirmó que “las situaciones que están ocurriendo en Gendarmería son alarmantes y pese a que las venimos denunciando de manera periódica hace unos cuatro años, nada cambia al interior de la institución”.

“Cuando denunciamos estos abusos, llegamos a acuerdos que no se cumplen, en otras ocasiones no responden correos y/o no adoptan la medida más básicas que solicitamos: investigar las denuncias por abusos homo/transfóbicos por personas no vinculadas con las víctimas, ni con los victimarios, ni tampoco con el recinto donde ocurren a los atropellos. Esto es lo que más teme o se niega Gendarmería, cuando sería la una de las pocas herramientas que ayudarían a dar con la verdad y hacer justicia”, agregó.

“Desde ahora en adelante el Movilh ya no comunicará de estos y otros casos solo a Gendarmería, sino que al mismo tiempo solicitaremos la intervención del INDH, a objeto de prevenir y erradicar la homo/transfobia tan arraigada en una institución y frente a lo cual el Ministerio de Justicia y su Subsecretaría de Derechos Humanos guardan total silencio”, finalizó Rementería.