El pasado jueves, Cintia Gabriela Pérez de 35 años, fue hallada sin vida en su casa, ubicada en la localidad de Florencio Varela, Buenos Aires, Argentina.
Al llegar al lugar, los policías fueron recibidos por el esposo de la víctima, Avelino Espinoza, quien aseguró que a eso de las 4 de la mañana salió de su casa para trabajar.
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El sujeto declaró que la mujer y su hijo de 11 años se habían quedado dormidos. Posteriormente su hermano lo habría llamado para informarle que Pérez había fallecido.
La fiscal Mariana Dongiovanni, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI), ordenó que se realizara la autopsia correspondiente para determinar fehacientemente las causas del deceso.
Sus contradicciones lo delataron
Sin embargo, las contradicciones en su relato y el informe forense determinaron que no se trataba de un suicidio. Asimismo, se reveló que la víctima había sido golpeada y tenía signos de asfixia, según consigna el medio Todo Noticias.
De acuerdo a la teoría de los detectives, Espinoza habría matado a su esposa y posteriormente se fue a trabajar. Incluso, no descartan que su hijo haya presenciado el crimen.
Debido a eso, el sujeto de 47 años será investigado por el delito de “homicidio doblemente calificado por el vínculo y por violencia de género”.
Cabe señalar que en caso de recibir condena, en Argentina, la única pena prevista para el delito de femicidio es la cadena perpetua.
