Más de 2 millones de dólares por 50 ventiladores mecánicos que no sirven fue lo que gastó el Ministerio de Salud en una compra a la empresa Markario General Trading LLC de Dubái hace poco más de un mes.

Según informó el diario La Segunda, el 8 de junio pasado la Central de Abastecimiento (Cenabast) emitió una boleta a nombre de esa empresa por la compra de ventiladores mecánicos UCI de origen suizo.

El mismo vespertino reveló los montos en juego que no están disponibles en la plataforma de Mercado Público, pues se habría tratado de una “transacción secreta, debido a la competencia entre países”. Algo que el exministro Mañalich aseguró en varias ocasiones al ser consultado por estas compras en los balances diarios de la pandemia.

En cifras, se indicó que el Minsal compró 50 ventiladores, desembolsando US$2,19 millones ($1.731.895.800), que ya estarían en el país pero que no se están utilizando debido a ciertas deficiencias consignadas en un informe técnico realizado por el ingeniero civil biomédico del Minsal Diego González.

En ese documento de cinco páginas, el experto advirtió sobre los ventiladores que “las principales dificultades encontradas fueron el sistema de conexión de oxígeno para suministro del equipo, debido a que presentaba la conexión tipo ‘nipple’ para ser usado con manguera de oxígeno de baja presión (tipo oxígenoterapia), y esto influye directamente en la estabilidad del suministro”.

También se detalló que “el armado del circuito de mangueras, al ser conectores plásticos, debían ser verificados constantemente ya que tendían a fugar por presión”. Por último, también registró problemas en la conexión a la red de alimentación de oxígeno y la falta de batería.

Minsal responde cuestionamientos

El subsecretario de Redes Asistenciales, Arturo Zúñiga, fue quien respondió a esta investigación, asegurando que “en ningún caso el Minsal ha recibido ventiladores defectuosos. Lo que ocurrió es que la empresa respectiva ofertó ventiladores mecánicos invasivos, y lo que se determinó es que los ventiladores que llegaron no lo eran“.

Además de recalcar que el dinero invertido “en ningún caso está perdido”, expresó que la empresa ya estaría al tanto de esta situación y que estaba “dispuesta a ofrecer alternativas para resolver la situación”.