Polémica causó la revelación de una licitación donde se cotizaron productos gourmet para los menús de La Moneda, cuya oferta fue emitida el 14 de abril de 2020 y adjudicada el 18 de mayo.

Esto último, por cuanto entre los alimentos en el listado se incluían delicatessen como caviar, mousse de pato, paté de jabalí y mozzarella de búfala, tal como detalló La Segunda.

Pese a que desde La Moneda indican que dichos productos no llegaron a ser comprados, el hecho gatilló críticas desde la oposición, desde donde cuestionaron la pertinencia de una licitación de este tipo en el contexto actual de crisis sanitaria y económica.

Desde la DC, los diputados Gabriel Silber, Gabriel Ascencio y Manuel Antonio Matta llamaron al gobierno “a tener empatía con la gente que está sufriendo y pasando hambre con la pandemia y a dejar sin efecto millonaria compra de productos gourmet para la Presidencia”.

Silber calificó la licitación como “un descriterio mayor, uno más que comete este gobierno, ya que nadie puede entender ni menos justificar que en tiempos de pandemia, de sufrimiento, el gobierno ordene la compra de este tipo de productos”.

“El 8 de abril pasado, el Gobierno anunció que habría un recorte de gastos superfluos en ministerios y servicios públicos debido a la pandemia que incluía un estricto seguimiento a las compras públicas y contrataciones, reducción en gasto de materiales de oficina, telefonía celular, viajes, recorte en gastos de ceremonial y protocolo, se prohibirían durante este año las celebraciones generales y aniversarios”, recordó.

Debido a lo anterior, anunció que acudirían a Contraloría “para que analice la procedencia de estos gastos realizados el 18 de mayo, a la luz de la circular número 15 del Ministerio de Hacienda, del 9 de abril que estableció el marco de reducción de gastos en todo el estado”.

Revisa a continuación el documento:

“Información incorrecta”

Desde la Presidencia negaron la información inicialmente publicada por La Segunda, asegurando que “la licitación a la que se hace referencia responde a requerimientos para la elaboración de menús internos en el Palacio de La Moneda y de reemplazo de servicios que históricamente se contrataban a proveedores externos y que eran más caros. Esta licitación tiene por objeto generar ahorros necesarios para el Estado”.

“Se trata de una licitación marco para acordar precios, en caso de ser requeridos, pero no existe obligación del Palacio de La Moneda de hacer pleno uso de dichos recursos. De hecho, no se ha adquirido paté de jabalí, queso ciliegine, mousse de pato, caviar ni trucha ni ningún producto sofisticado”, afirmaron.

En contraste, detallaron desde La Moneda que “los principales ítems adquiridos a la fecha son: quesos, tomates, jamón y mantequilla, destinados mayoritariamente para la elaboración de colaciones frías para las personas que trabajan en La Moneda, que reemplazaron los platos calientes que habitualmente se proveían en el casino institucional, antes de la actual pandemia. El gasto promedio, en los últimos 4 meses (Marzo – Junio), fue de $4.641.253″.

“El artículo de La Segunda contiene información incorrecta, puesto que el ‘monto ofertado’ corresponde al listado de precios unitarios licitado a la empresa Demercado, pero no a lo demandado para los servicios alimentarios en el Palacio de La Moneda”, respondieron.