Uno de los primeros pacientes con COVID-19 que fue trasladado desde Santiago a Concepción, fue dado de alta. Se trata de José Sepúlveda, de 30 años, quien aseguró estaba al borde de la muerte.
El hombre empezó con síntomas de fiebre y dificultad respiratoria a finales de abril, y ahora, en Santiago, pudo reencontrarse con su hija.
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Lo último que recuerda Sepúlveda, es que se realizó el examen PCR en el Hospital Sótero del Río y que días después fue a Urgencias del Hospital Padre Hurtado, donde finalmente fue internado.
Debido a su estado grave, fue trasladado al Hospital Guillermo Grant Benavente de Concepción, donde lo tuvieron en coma inducido y ventilación mecánica.
Luego de cinco días, Sepúlveda despertó pero no sabía dónde estaba.
“Yo pensé que era una broma, que estaba en el Padre Hurtado todavía. Ahí me dijeron que me trajeron en una cápsula, que estaba grave y que fui uno de los primeros pacientes en ser trasladado (…) No lo podía creer”, contó a El Mercurio, cuando ya recuperado estaba en una residencia sanitaria de la zona penquista.
Reencuentro con su hija
Según contaron sus familiares a Meganoticias, José Sepúlveda se salvó gracias a las videollamadas que realizaba con ellos.
“Rezábamos para que saliera adelante. Cuando vio a su hija en una videollamada fue como un golpe vitamínico. De ahí comenzó a mejorar y no paró“, señaló María Esther Rivera, su exsuegra.
Ya dado de alta, pudo regresar a Santiago y reencontrarse con su hija Josefa. “Fue mi esperanza y luz en los momentos más difíciles de mi vida (…) no es lo mismo darse un abrazo y verse. Es emocionante volver a verla”, comentó José.
Y ahora, aseguró, quiere aprovechar la segunda oportunidad de vivir y disfrutar de su familia.
