Jaime Mañalich ha tenido un rol preponderante en medio de la pandemia, ya que lidera la cartera de Salud. En este contexto, ha presidido varias reuniones y ha sido el encargado de anunciar medidas preventivas y los balances de contagiados en nuestro país.

Así también ha sido el foco de atención y blanco de críticas por declaraciones relacionadas al COVID-19, o por las pocas medidas -a juicio de varios- que se han tomado para controlar su propagación.

Uno de los temas de los que se ha preocupado de mayor manera es de la disponibilidad de ventiladores mecánicos, sobre todo si el número de casos críticos aumenta.

Consultado por La Tercera sobre este tema, Mañalich detalló que “estamos conectando cada día, en promedio, entre cinco y seis pacientes nuevos. En el peor de los escenarios van a ser 10 a 15 y los respiradores, a medida que la gente se mejora, se desocupan. En Chile, en promedio, las personas los están usando cinco días”. Y agregó que hay 240 ventiladores de reserva.

Sobre la interrogante de cuántos ventiladores estarán operativos durante el peak del coronavirus en nuestro país, aseguró que “serán 2.200 aproximadamente, sin mencionar los del sector privado, que son otros 400 que podemos reclutar. Además, las máquinas de anestesia convertibles en respiradores son otros 500. Y no estamos contando los respiradores pediátricos de niños, que son perfectamente usables en viejitos que pesen 50 a 60 kilos. Nuestro problema era de distribución y por eso ordené una central de ventiladores, para poder distribuirlos”.

Con respecto al número total, declaró que lo encuentra completamente excesivo, “pero nosotros nos preparamos para un escenario muy duro. Incluso, temo la situación contraria, y es que después de esto me hagan una acusación constitucional por haber comprado demasiados respiradores”.

Con respecto al impulso que se está dando a la construcción en nuestro país de respiradores, Mañalich detalló al medio que “el MIT (Massachusetts Institute of Technology), liberó unos planos con mucho detalle para fabricarlos, sencillos si tú quieres, pero que podría representar para nosotros el poder tener estos equipos y una fuente de ahorro de recursos muy importante. Entonces Famae (Fábricas y Maestranzas del Ejército) y Asmar (Astilleros y Maestranzas de la Armada), y alguna empresa privada también, están trabajando para fabricar ventiladores. Yo creo que estamos -no quiero exagerar- a no más de seis días de probar los primeros prototipos”.

¿Cuál podría ser el mes más complicado para Chile? El titular de Salud dijo que desde el punto de vista de demanda hospitalaria, sería mayo. “Pero en ese contexto, para la situación actual, es imposible que se produzca un aumento violento en la necesidad de respiradores, y, si así fuera, tenemos. Llegan algunos la próxima semana desde China y compramos 300 más”.

¿Aumentará el número de contagiados cada día en ese periodo? Mañalich es riguroso y señala que prefiere no dar cifras; no obstante, dijo que “circula un video en redes sociales de un experto que dice que, incluso si de aquí para adelante nos comportáramos como Italia, los números no dan por ningún lado para pensar en una catástrofe en Chile”.

Finalmente, y tras ser consultado si podría terminar como líder en el manejo de esta pandemia, aseguró que solo “estoy interesado en terminar vivo esta pega y que nos vaya bien. Nada más”.

Jaime Mañalich
Agencia UNO

Cómo vive la emergencia en su casa

En entrevista con T13 Central, el titular de Salud contó cómo se vive en su casa debido a la pandemia, revelando también que su esposa está en “cuarentena absoluta”.

Lo anterior, ya que “el riesgo para ella es gigantesco, estamos durmiendo en piezas separadas, con una distancia de no menos de dos metros, tratamos de no estar juntos… estamos tomando todas las providencias”.

Recordemos que su esposa, María Cristina Raffo, fue trasplantada de un pulmón en 2011, por lo que pertenece al grupo de riesgo.

Con respecto a estos cuidados, Mañalich hizo una crítica hacia quienes no los tienen. “A pesar de toda la información, de las campañas, mucha gente sigue viviendo su vida como si todo fuera normal, como si nada hubiera pasado, como si no se fueran a contagiar”, señaló.

Finalmente y debido a su cargo, dice que cree que se contagiará: “Es la pega, viene con la descripción del cargo de esta crisis que estamos viviendo… hay que hacer lo que hay que hacer”, cerró.