El Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh) denunció este martes que un joven sufrió una agresión homofóbica por parte de un fiscalizador del Transantantiago en el sector oriente de la capital.

La situación afectó al hombre identificado con las iniciales B.F.N. (25) cuando se disponía a tomar locomoción colectiva en avenida Ossa con Irarrázaval, frente al mall Plaza Egaña, tras culminar su jornada laboral durante la noche del miércoles pasado.

Según el denunciante, el agresor ya lo había observado en otras ocasiones aparentemente en rechazo a su expresión de género, pero solo la semana pasada lo agredió físicamente, resultando con una contusión craneana, luxación de hombro, herida en su boca y fractura de humero proximal, lo cual le valió un reposo por 24 días según consta en el informe médico de la Mutual de Seguridad.

El denunciado sería un trabajador de la empresa CES-Spa, según el Movilh, y por ahora no ha sido identificado.

“Cuando venía la micro que tomo habitualmente, pasé la franja negra que ellos (los de CES-Spa) ponen en el paradero. Ahí el agresor me dijo dos veces ‘paga po, maricón culiao (sic)’. Cuando le pregunté que le pasaba, frente a toda la gente me comenzó a golpear con pies y manos hasta que perdí la conciencia. Al recuperar la conciencia, alguna gente me estaba auxiliando. Estaba lleno de sangre. El fiscalizador salió arrancando con otros fiscalizadores”, acusó el joven agredido según el comunicado del Movilh.

B.F.N. agregó que “me reventó la boca. Tengo 20 puntos. Me golpeó tanto en la cabeza que tengo contusiones, mucho dolor y 5 puntos detrás de la oreja. Me luxó el brazo y me fracturó el húmero. Llamamos a carabineros y esperamos su presencia, pero no llegaron. Nos fuimos directo a la Mutual de Seguridad después. Me atendieron bien. En mi trabajo me dieron todo el apoyo”.

El vocero del Movilh, Óscar Rementería, exigió que la empresa dé a conocer la identidad del fiscalizador y tome medidas para evitar que se repitan estos casos.

Lo ocurrido es un paliza gratuita cargada de homofobia y cobardía, pues el trabajador, como un delincuente cualquiera, se dio a la fuga. El joven está tan afectado, que los dolores de cabeza y los vomitos no han pasado con los días, a un punto que debe estar asistiendo continuamente a la Mutual de Seguridad”, indicó.

Además, señaló que orientará a la víctima para que presente acciones legales contra quienes resulten responsables.

Gobierno condenó el hecho

Consultada por lo ocurrido, la ministra de Transportes, Gloria Hutt, condenó el hecho y señaló que se trata de un fiscalizador externo perteneciente a una empresa subcontratista.

“No hay espacio alguno para hacer más análisis que una condena”, señaló la secretaria de Estado en un punto de prensa.

Gloria Hutt agregó que “no me cabe duda que la propia empresa debe tener términos de sus contratos que actúan sobre casos como éste”.

“No es posible pensar que una persona así siga haciendo controles”, puntualizó.