Este martes un grupo de apoderados de la Escuela de Lenguaje Acuarela del Mar, en la ciudad de Viña del Mar, llegaron hasta las afueras del establecimiento para exigir explicaciones en medio de un aparente caso de abuso sexual infantil.
Lo anterior se produjo luego que un inquietante dibujo de Nicole, madre de una niña de cinco años y alumna del colegio, se viralizara en un grupo de WhatsApp de padres y apoderados. La mujer fue dibujando de la manera más simple posible cada detalle de lo que su hija le iba contando.
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Esta determinación no fue azarosa, pues en julio pasado surgieron los primeros antecedente tras el abrupto retiro del establecimiento de un compañero de su hija.
De acuerdo al dibujo, la “tía de la oficina (quien también es directora de la escuela) la quería mucho, le daba besos en la boca, le sacaba fotos, le hacía cariños en la guatita y le iba a regalar unos patines“.
Tras ser compartido por WhatsApp, las coincidencias en los relatos se hicieron presente y los apoderados quedaron “paralizados”, consigna el medio local La Estrella de Valparaíso.
“El primer niño al que retiraron, sus padres hicieron la denuncia en la PDI y en la Fiscalía, no puede ser que en el jardín no se sepa. Esto fue hace más de un mes y nunca nos dieron explicaciones. ¿Por qué tenemos que enterarnos de esta forma? Y además ella (la directora) ni siquiera estuvo presente”, comentó Nicole al citado diario.
Obviamente la mujer retiró a la niña de inmediato de la escuela y aseguró que todos los apoderados se sumarán a la misma causa.
Desde el establecimiento, Daniela Duarte, profesora encargada de la escuela de lenguaje, comentó que solo este martes se enteraron de la denuncia a través de las redes sociales y que ya están trabajando con abogados para determinar los pasos a seguir.
Crudo relato
Llanto, rabia e impotencia fueron las reacciones naturales de estos padres y apoderados tras la reunión que sostuvieron este martes con las docentes de la escuela. Y es que allí se conocieron crudos relatos que incluso terminaron con una mamá desmayada.
Fue el relato de una mamá llamada Fresia, según indica el diario local, el que más impactó a los presentes. De hecho, ella fue la primera en denunciar abusos en esta escuela.
“Todo empezó el 12 de julio, cuando fue la fiesta de disfraces para terminar el primer semestre. Ese día mi hijo llegó normal, pero al día siguiente, mientas lo duchaba se quejó de dolor en el pene. Me culpé pensando que había descuidado su higiene. Su aparato estaba irritado. El domingo, mientras yo le contaba a mi mamá lo que había pasado, él me interrumpe y dice ‘no, a mí el fantasma me bajó los pantalones y me aplastó el pene’. Yo le dije, hijo los fantasmas no existen, pero él insistió y me dijo ‘no, el fantasma es la tía Sandra’ y se tira al sillón con cara de desconsolado… y me dice ‘no puedo hablar'”, contó Fresia.
En ese momento, la madre no presionó al niño para que le contara detalles, simplemente lo llevó al hospital Gustavo Fricke para constatar lesiones. De allí la derivaron a la PDI en Valparaíso donde le tomaron una pequeña declaración al pequeño. “Firmar esa declaración para mí fue… como que mi vida se acabó en ese momento porque en ella mi hijo explicó en detalle lo que ella le hizo“, relató.
El tema ha sido tan grave para el menor de edad, que su madre aseguró que comenzó a orinarse y que recientemente tuvo una crisis al encontrarse con la directora de la escuela en un desfile de establecimientos.
Asimismo, aseguró que por recomendación de la PDI, ella retiró al niño sindar explicaciones, pero ahora cree que fue un error haber confiado en la justicia, porque no ha pasado nada.
La fiscal María Alejandra es quien está a cargo del caso, confirmando que el 18 de julio se presentó una denuncia por presunto abuso sexual de un menor, y que el “2 de agosto ya se había tomado declaración tanto a la madre como al menor y se está a la espera de una evaluación psicológica“, consignó el medio este miércoles, cuando han pasado casi dos meses de aquella denuncia.
