El gobierno taiwanés manifestó este domingo su más enérgico rechazo al ataque ocurrido esta semana contra un restaurante taiwanés emplazado en Estación Central, a manos de un grupo de manifestantes chinos.

La situación fue dada a conocer en redes sociales el viernes, a través de videos que mostraban cómo un grupo de partidarios del gobierno chino llegaban hasta el restaurante Pollo Chang, ubicado en Unión Latinoamericana 14, debido a que su dueño taiwanés habría hecho público su apoyo al movimiento Freedom Hong Kong, que aboga por mayores libertades en la isla.

Los videos muestran a una veintena de jóvenes chinos quienes irrumpieron en el restaurante, colgaron una bandera china y orinaron en la entrada del local una vez que este bajó sus cortinas. Según denunció en Twitter el conocido activista de derechos humanos y exlíder estudiantil de las protestas de la plaza de Tiananmen, Fengsuo Zhou, también habrían agredido a otro ciudadano chino que se trenzó en una discusión con ellos.

Los jóvenes habrían organizado su “funa” a través de Wechat, un servicio de mensajería similar a WhatsApp, que grupos de Derechos Humanos  ya han denunciado y que está bajo la revisión de los organismos de seguridad del gobierno chino.

Tras enterarse de estos hechos, la portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores de Taiwán, Joanne Ou, indicó que el gobierno de la isla “condena y denuncia el comportamiento violento e irracional de esta turba china”, reporta el medio local, Focus Taiwan.

Ou agregó que el gobierno taiwanés se puso en contacto con el propietario del local, de apellido Chang, a través de su oficina de intereses en Chile ese mismo viernes, a fin de indicarle que están determinados a asegurar la integridad de todos sus connacionales en el exterior. Además le ofreció asistencia legal en caso de querer denunciar la agresión a las autoridades chilenas.

La portavoz aprovechó de expresar el apoyo del gobierno taiwanés a las masivas protestas en Hong Kong, que exigen reformas democráticas en el territorio controlado por China.

Recordemos que Hong Kong lleva más de 4 meses convulsionado por masivas protestas, luego de que su población exigiera el retiro de un proyecto de ley que facultaba a extraditar ciudadanos hongkoneses para juzgarlos en China, en lo que sería la puerta de entrada a un mayor control político y policial sobre la isla.

Hong Kong y Macao, excolonias europeas, tienen una política de “un país, dos administraciones”, que les permite ser parte de China mientras conservan un sistema multipartidista con mayores grados de libertad de expresión que el férreo control chino. Por su parte, Taiwán se declara un territorio independiente y permanece en una tensa pugna con China, que lo considera parte de su nación.