Felipe Rojas, vecino de Fernanda Maciel, es el único imputado en el caso. El joven de 25 años fue formalizado por los cargos de homicidio, inhumación ilegal y aborto.

Pero, ¿qué hizo este amigo de “Fer” el día de su desaparición? Tras ser detenido, salieron a la luz las declaraciones y los registros de la carpeta investigativa, que podrían reconstruir el paso a paso de su actuar aquella tarde, tal y como mostró el matinal de Canal 13, Bienvenidos.

La mañana del sábado 10 de febrero, Felipe habría hablado con Fernanda por Whatsapp, para coordinar un encuentro en la bodega. Si bien las cámaras de seguridad captaron a Maciel saliendo de su casa aquella tarde, Rojas declaró que ella nunca llegó.

El imputado llegó pasada las 17 horas a la bodega en bicicleta, pero por la calle contraria, tal y como evidencian los registros de los dispositivos del sector.

Captura Canal 13
Captura Canal 13

Si bien Rojas habría ingresado al inmueble donde encontraron el cuerpo de Fernanda, él señaló en su declaración que estuvo en el patio trasero de su casa toda la tarde. Sin embargo, su cuñado descartó esta opción, afirmando que no lo vio en ese lugar.

Tras regresar de la bodega, Rojas habría intentado crear una coartada para desvincularse de la desaparición de su amiga, por lo que gritó a través de la pandereta llamando a la joven. Fue en ese momento cuando la madre de Fernanda salió y le dijo que ella no se encontraba en la casa.

A eso de las 19 horas, Felipe regresó a la bodega, supuestamente para alimentar a los perros, una misión que era parte de su trabajo como cuidador. Esta visita al inmueble sería clave para determinar cuándo y en qué momento murió Fernanda.

En este contexto, la Fiscalía cree que el imputado “acomodó” su declaración para no levantar sospechas y hacer parecer que aquel sábado fue un día común y corriente para él.