Dos semanas de incertidumbre han vivido los familiares de Catalina Álvarez, joven de 16 años que desapareció en la localidad de Paipote, en la Región de Atacama.

Tras ir a una fiesta con sus amigas, a eso de las 3 am la adolescente llamó a su madre para avisarle que tomaría un colectivo para devolverse a su casa. Sin embargo, nunca llegó.

“Lo que cuentan las amigas, es que ella se quiso ir, tomó un colectivo y supuestamente se subió. De ahí no supimos nada más de ella”, relató la tía de Catalina, Jacqueline Olave, en entrevista con el matinal Bienvenidos.

Más tarde, Ximena, madre la joven, la llamó para saber por qué no llegaba. Según cuenta Olave, Catalina solo alcanzó a decir unas palabras y se cortó la comunicación. “Le dijo: ‘¡Ay mamita!’, nada más”, precisó. Este último mensaje de su hija, fue en tono de angustia y desesperación. Posteriormente el teléfono fue apagado.

“De vuelta a casa, ella venía sola”, describió Olave, afirmando que la PDI ya tendría identificado a todos los colectivos que trabajaron en el sector aquella noche. “Sin embargo esa información a nosotros no nos ha llegado”, agregó.

De acuerdo a la teoría que manejan los familiares, una de las amigas de la adolescente sabría algo más sobre el día de la desaparición. Esta persona es mayor de edad y habría prestado declaración a la PDI. “Nosotros fuimos a conversar con ella, y dice que cuando fueron al baño y volvieron, Catalina ya no estaba”, relató Olave.

“Ella sabe algo. Cambia las versiones”, afirmó el padre de la joven. “Primero le dijo a su mamá que ella la embarcó en un taxi a las 1 am, siendo que fue mentira. Después dijo que se habían ido a la fiesta en auto, pero el dueño de casa afirmó que llegaron a pie”, planteó desesperado.

Cabe señalar que la senadora Yasna Provoste y el diputado Juan Santana se reunieron el pasado jueves con el director de la PDI Héctor Espinoza, quien anunció el envío de una unidad especializada para reforzar las labores de búsqueda de la joven.